El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha anunciado que España colaborará con entre 100.000 y 150.000 euros en la lucha contra el ébola en Guinea. Así se lo ha comunicado a la comisaria europea de Cooperación, Ayuda Humanitaria y Respuesta a la Crisis, Kirstalina Georgieva en una reciente reunión.

La contribución de emergencia la gestionarán la Organización Mundial de la Salud (OMS) u otra ONG especializada para el caso de Guinea, donde el virus ya ha llegado a la capital, Conakry. La ayuda española se une a la que ha enviado la UE a los países afectados.

En Malí se han identificado los primeros posibles casos de la enfermedad, lo que ha incrementado el temor de que aumente la gravedad de la epidemia en el oeste de África. Malí se convertiría así en el tercer país al que llega el brote del ébola, tras Liberia. Una epidemia que podría convertirse en una catástrofe sin precedentes en una de las regiones más pobres de África y sin apenas recursos sanitarios. Se estudian posibles casos en Sierra Leona.

Esta no será la única ayuda del gobierno español, ya que se ha articulado una respuesta humanitaria de 250.000 euros para asistir a refugiados en Chad, a la par que se negocia una contribución de 135.000 euros adicionales en ayuda alimentaria, ha dicho el ministro español.

Alerta, virus letal

La historia del virus del Ébola es corta pero peligrosa y África ha sido su bastión de actuación. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde su descubrimiento en 1976 se han cifrado en torno a 1.850 los casos de fiebre hemorrágica, de las que más de 1.200 fueron mortales. De octubre de 2001 a diciembre de 2003, varios brotes de Ébola del subtipo Zaire fueron reportados en Gabón y la República del Congo, con un total de 302 casos y 254 muertes.

El origen de este virus es incierto pero los científicos no dudan en relacionar el contacto humano con animales infectados y muertos. Se sospecha que tres especies de murciélagos de la fruta son los huéspedes naturales de este virus.

La enfermedad del ébola es altamente contagiosa, se transmite de humano a humano por simple contacto con sangre y fluidos corporales. No existe ninguna vacuna o tratamiento es todavía disponible para este patógeno, uno de los más letales del mundo, con una tasa de mortalidad de hasta el 90% dependiendo de la cepa.

Tras el reciente brote en África Occidental, la Comisión Europea ha dado 500.000 euros para ayudar a contener la propagación del virus mortal en Guinea y países vecinos. La Comisión también ha enviado a un experto en salud a Guinea para ayudar a evaluar la situación y actuar de enlace con las autoridades locales.

«Estamos profundamente preocupados por la propagación de esta enfermedad virulenta y nuestro apoyo ayudará a garantizar la asistencia médica inmediata a los afectados por ella», ha dicho Kristalina Georgieva, Ayuda Humanitaria y Respuesta a las Crisis. «Es vital que actuemos con rapidez para evitar que el brote se propague, en especial a los países vecinos.»

Los fondos serán utilizados por la organización asociada humanitaria de la Comisión de Médicos Sin Fronteras para el manejo clínico, incluyendo el aislamiento de los pacientes y el apoyo psicosocial, la localización de casos sospechosos, así como la capacitación y el suministro de equipo de protección personal para los trabajadores de salud.

Este es el primer brote del virus Ébola registrado en la región. Descubierta por primera vez en la RD del Congo y Sudán en 1976, se han registrado varios brotes en África oriental y central, pero nunca en el África occidental.

Guinea es uno de los países menos adelantados, afectados periódicamente por epidemias, como la meningitis, la fiebre amarilla y especialmente el cólera. La Comisión Europea se ha implicado en la lucha contra estos brotes con intervenciones a nivel regional.

El 22 de marzo el Gobierno de Guinea reveló que el Instituto Pasteur en Francia había identificado el filovirus Ebola en muestras de casos inicialmente asociados con fiebre Lhassa.