La isla del tesoro. Arte británico de Holbein a Hockney
5 de octubre 2012 – 20 de enero 2013
En la Fundación March
Un relato de la extraordinaria dimensión y la considerable vitalidad que conoció el arte británico entre los siglos XV y XX es lo que ofrece esta exposición, cuyo título hace eco de la novela homónima del escritor británico Robert Louis Stevenson, al reflejar cómo la isla tiene un tesoro –su arte, su pintura y escultura- que, como casi todos los tesoros, está aún medio oculto y por descubrir. Y la perspectiva adoptada ha sido la de los lugares geográficos; la idea que subyace al proyecto ha sido preguntarse dónde estaba y dónde está, en lugar de qué era y qué es el arte británico en sus cinco siglos de historia, del XVI al XX. La crónica del arte específicamente británico lo presenta como sorprendentemente universal: un considerable número de artistas extranjeros hizo de Gran Bretaña su lugar de residencia y de trabajo.
La muestra reúne 180 piezas –pinturas, esculturas, obra sobre papel, libros, revistas y fotografías– realizadas por más de un centenar de artistas, y procedentes de diversas instituciones europeas, principalmente británicas. Todo ese caudal de obras, que abraza más de cinco siglos, está organizado en siete apartados: desde los impresionantes ejemplos de escultura religiosa dañada por los iconoclastas puritanos durante la Reforma, hasta las piezas Pop de Blake o Hamilton, el conceptualismo de un Richard Long o la emblemática escultura de Toni Cragg, Britain Seen from the North, de 1981).Las secciones de la exposición se titulan Destrucción y Reforma (1520-1620), La revolución y el Barroco (1620-1720), Sociedad y sátira (1720-1800), Paisajes de la mente (1760-1850), Realismo y reacción (1850-1900), Modernidad y tradición (1900-1940) y Un mundo feliz (1945-1980).
La isla del tesoro. Arte británico de Holbein a Hockney está acompañada de un catálogo profusamente ilustrado, en dos ediciones, española e inglesa, que contiene una fresca, pero rigurosa y completa introducción al arte, la historia y la cultura visual de Gran Bretaña durante cinco siglos.