El informe, titulado «La trampa de la austeridad» desvela que las medidas de austeridad puestas en marcha para equilibrar las cuentas después de los miles de millones de euros invertidos en el rescate de la banca, están causando más pobreza y desigualdad. Y no están consiguiendo reducir los niveles de deuda, como era su objetivo, ni crear un crecimiento económico inclusivo.
«La austeridad hoy, como las medidas de ajuste en el pasado en América Latina o Asia, no sólo no son la solución a la crisis, sino la medicina equivocada que puede terminar matando al paciente. Lo hemos visto en el pasado y lo estamos viendo a diario ahora en Europa. Hay alternativas a la austeridad, que permitirían en el futuro un crecimiento más justo e inclusivo que favorezca a las personas y es urgente ponerlas en marcha cuanto antes», ha asegurado Teresa Cavero, investigadora de Intermon Oxfam y coautora del informe.
Según sus datos, en el año 2025 habrá 146 millones de europeos viviendo en situación de pobreza, 25 millones más que en la actualidad.
Para Jaime Atienza, director de campañas y estudios de Intermon Oxfam «con las actuales políticas se camina hacia una Europa más injusta y hacia una recuperación del sustrato social más lenta, que podría llevar décadas».
En este sentido, la ONG ha advertido de que los recortes frenan los mecanismos de recuperación social y dificultan el proceso, «además de estar acentuando la brecha entre las capas más altas de la sociedad y aquellos que viven en situación de exclusión».
El estudio apoya esta posibilidad con datos. En 2011, el 10% de los más ricos de Europa obtenía el 24% de los ingresos totales de la UE, mientras que el 10% más pobre sólo podía acceder al 3%. Si la evolución de la pobreza continúa como hasta ahora, en 2025 estas cifras se ampliarán y la población más favorecida ganará hasta 18 veces más que la más débil económicamente hablando. Y España no está en el mejor lugar ya que ocupa el cuarto puesto de la UE en cuanto a desigualdad social, «solo por detrás de Letonia, Bulgaria y Grecia», ha precisado Teresa Cavero, investigadora de Intermon Oxfam.
España abocada a la pobreza
Según un análisis realizado por Metroscopia para Intermon Oxfam, un 76% de la población española considera que las medidas de austeridad son las principales responsables del aumento de la pobreza en el país.
En la misma línea, el informe de la ONG subraya que la pobreza en España aumentó en más de 2 millones de personas desde que empezó la crisis en 2008 hasta 2012, es decir unas 500.000 personas cada año. Y, en el caso de continuar con esta tendencia de crecimiento exponencial, en el año 2025 España tendría 8 millones más de ciudadanos viviendo en situación de pobreza.
Intermon Oxfam aclara que se trata de personas que viven con menos del 60 por ciento de la renta media nacional (15.445 € al año) o que sufren privaciones en la alimentación, la vivienda, el empleo o en los niveles mínimos de bienestar, según ha detallado, Teresa Cavero.
Para la ONG, en España será muy evidente el crecimiento de la llamada «pobreza activa», es decir «personas que, a pesar de trabajar, no reciben la remuneración suficiente para poder vivir», refiriéndose a la proliferación de empleos precarios que impide a un sector de la población salir de la pobreza.
Por otro lado, la mayoría de los españoles, añade el estudio de Metroscopia/Intermon, están dispuestos a realizar voluntariado, hacer donaciones económicas o a rechazar empleos en negro para ayudar a combatir la desigualdad, sin embargo, más de la mitad asegura que no están dispuestos a pagar más impuestos.
Otras alternativas
«La gestión europea de la crisis económica amenaza con revertir décadas de progreso en materia de derechos sociales. Los agresivos recortes en la seguridad social, la sanidad y la educación, los derechos mermados de los trabajadores y un sistema fiscal injusto están atrapando a millones de ciudadanos europeos en el círculo vicioso de la pobreza, que podría perdurar durante generaciones. No tiene sentido moral ni económico», ha destacado Teresa Cavero.
El informe de la ONG pide a los responsables españoles y europeos y a los ministros de finanzas de la UE que lideren otros modelos de crecimiento social y económico que inviertan en las personas, refuercen la democracia y busquen un sistema fiscal justo. Los gobiernos, según Cavero, «podrían recaudar millones para servicios públicos como la sanidad y la educación subiendo los impuestos a las personas más ricas, tomando medidas para combatir la evasión fiscal y aplicando una tasa a las transacciones financieras internacionales», medidas que servirían, además, para regular al sector financiero y evitar futuras crisis.
«Es posible impulsar un nuevo modelo de prosperidad. Invirtiendo en escuelas, hospitales, vivienda, investigación y tecnología, millones de ciudadanos y ciudadanas europeos podrían volver a trabajar e impulsar una economía sostenible», concluye la investigadora de IO.
En este sentido, Intermon Oxfam ha solicitado a los gobiernos europeos que se protejan los presupuestos de ayuda al desarrollo y que se invierta en los servicios públicos, entre los que ha destacado la sanidad, la educación y los sistemas de protección social.
Por último, han señalado la necesidad de reformar el sistema fiscal para aplicar impuestos sobre la acumulación de riquezas y tasas sobre las transacciones financieras, destacado la importancia de combatir la evasión y elusión fiscal a través de medidas que mejoren la transparencia y el intercambio de información y de leyes internacionales que obliguen también a los paraísos fiscales.