Monte Saint-Michel, Versalles, Córcega, Saint Malo. No, no estamos hablando de un viaje turístico por Francia. O quizá sí. Esos son algunos de los lugares por los que pasará el Tour 2013, que como siempre aprovecha la disputa de la vuelta ciclista más importante por etapas del mundo, para promocionar al país.
La montaña, la que le ha dado tanto a la ronda gala será también la gran protagonista. Seis etapas de media montaña y cuatro de alta con finales en alto. En total 28 puertos, el triple que en la edición de 2012. No habrá Tourmalet pero el Alpe d'Huez se subirá dos veces. Y por primera vez se llegará a París de noche. El 21 de julio.
En plena efervescencia independentista en Europa, el país más centralista del continente, empieza las tres primeras etapas en Córcega. De ahí se pasará a Niza y luego la gran serpiente multicolor discurrirá por todo el hexágono. Muy francés todo. No habrá etapas en otros países como se había celebrado en las últimas ediciones.
Los útlimos vencedores de la ronda gala han sido Wiggins (2012), Evans (2011), Contador (2009) y Schleck (2010). Un tour que viene marcado de nuevo por la lucha contra el dopaje, sobre todo después de que los directores de la carrera, decidieran hace unos meses borrar de la historia la presencia de Lance Armstrong. Jean-Etienne Amaury, presidente de ASO, la empresa que organiza la carrera insiste en que «el dopaje es una plaga que va contra los valores del deporte».