Durante 45 días, hasta el 2 de septiembre, hay programadas 232 presentaciones durante esta 92ª edición de un festival que entre las innovaciones tiene previsto un programa de música sacra, con «La Creación» de Joseph Haydn, entre otras, que permitirá comparar distintas religiones. Esta «apertura espiritual» del festival muestra que el objetivo es «concentrarse nuevamente en la música sacra», que según Pereira ha perdido terreno en estos últimos años. Según él, «los compositores escribieron sus más hermosas obras para los edificios religiosos, y Salzburgo, con sus magníficas iglesias, es un lugar lógico para realizar un festival de música sacra».
Participará la Orquesta Filarmónica de Israel, que dirige el indio Zubin Metha, durante tres conciertos. En 2013, habrá música vinculada con la religión budista y en 2014 con el islam. «A partir del 2013 voy a realizar cada año una petición a un compositor contemporáneo», aseguró Pereira. En 2013, el compositor húngaro György Kurtag trabajará en base a «Fin de partida» de Samuel Beckett. Posteriormente intervendrán el francés Marc André Dalbavie y el británico Thomas Ades.
El 27 de julio, el prestigioso director austríaco Nikolaus Harnoncourt, considerado como el «papa» de la renovación barroca, abrirá un ciclo de óperas con su versión de «La flauta encantada» de Mozart. Por primera vez, Harnoncourt interpretará con instrumentos antiguos una obra de Mozart en la ciudad natal de este compositor con su formación, el Concentus Musicus Wien.
Para Pereira, se trata de «uno de los acontecimientos más importantes del festival». En materia de teatro, se presentará una nueva puesta en escena del Príncipe de Hamburgo de Heinrich von Kleist, así como «Peer Gynt» de Henrik Ibsen, bajo la dirección de Irina Brook. Alexander Pereira sucede al director de teatro y de ópera alemán Jürgen Flimm y al pianista austríaco Markus Hinterhäuser, quien ocupó el puesto en forma interina durante un año.
Pereira, hijo de un diplomático, se dedicó inicialmente a la promoción del turismo en Austria. Luego trabajó para el grupo industrial Olivetti en Alemania. En 1979 fue el encargado de los Conciertos Bach en Fráncfort (oeste de Alemania), y en 1984 fue secretario general de la gran sala de conciertos de Viena, Konzerthaus. En 1991 fue nombrado director general de la Opera de Zúrich.
Salzburgo no conoce la crisis. El precio de las entradas oscila entre los 400 euros y los 5 euros. Más de la mitad de las entradas vendidas están entre los 5 y los 100 euros.