La literatura en español está de fiesta, tras la concesión del Premio Nobel de Literatura a Mario Vargas Llosa. Y de la fiesta también se siente partícipe el presidente de la Comisión europea, José Manuel Durao Barroso, que se ha referido al escritor hispanoperuano como un literato latinoamericano, europeo y universal.
Barroso ha elogiado el «espíritu crítico e inconformista» de Vargas Llosa, cuyo talento creativo ha recibido una merecida recompensa. El presidente del gobierno comunitario dice que el nuevo Nobel «ha sido y será fuente de inspiración para tantas generaciones de lectores y lectoras.»
En la Feria del Libro de Fráncfort, la noticia del Nobel a Vargas Llosa se ha recibido con lágrimas de alegría y champán, según recoge la agencia France Press, que señala también cómo hay unanimidad por el talento literario del premiado, pero no tanto sobre sus ideas políticas. Fue candidato sin éxito a la presidencia de Perú por el partido de centro-derecha Frente Democrático.
Vargas Llosa nació en Arequipa (Perú) en 1936. Desde 1958 ha residido en España, Reino Unido y Francia y tiene la nacionalidad española desde 1993. La Academia sueca le ha concedido el galardón por su «cartografía de las estructuras del poder y sus afiladas imágenes de la resistencia, rebelión y derrota del individuo». Vargas Llosa, eterno candidato al premio, es el undécimo autor hispanoamericano que recibe el Nobel de Literatura y el sexto español. Los escritores en lengua inglesa son clara mayoría en la lista de estos Nobel con 27 premiados, 14 han sido escritores en francés y 12 en alemán.