Todo apunta a un relevo en la actual coalición que gobierna en Schleswig-Holstein, la misma que en el gobierno de Berlín entre la CDU y el FDP. Las encuestas dan un empate entre el partido de Merkel y los socialdemócratas del SPD, con ligera ventaja para estos últimos. La cuestión está en los votos que consigan los otros partidos para permitir formar un ejecutivo estable en este land de 2,2 millones de electores. Además del desbarajuste para formar una mayoría, Merkel teme la repercusión de un mal resultado de los liberales en la coalición del gobierno federal.
El FDP, según los sondeos, obtendría un 7% de los votos, muy por debajo de los Verdes, que gobernaron con el SPD, que conseguirían un 12%. Pero se espera además un fuerte avance del partido sorpresa en Alemania, Los Piratas, que podrían lograr hasta un 9% de los sufragios con un programa político basado en la defensa de la libertad en internet.
Si se cumplen estas previsiones de las encuestas, Los Piratas estarían ya en tres parlamentos regionales de Alemania, después de haberlo conseguido en el de Berlín y en el Sarre. Aún hay otra posibilidad de formar una coalición de gobierno entre el partido más votado y el SSW, el partido de la minoría danesa.
Así pues, todo está abierto en Scheswig-Holstein, cuando el domingo que viene Merkel tendrá que pasar otra prueba aún más difícil: otros comicios regionales, pero esta vez de más envergadura, los de Renania del Norte-Westfalia, el land más poblado del país.