Elecciones en Birmania sin oposición ni observadores

Birmania ha votado este domingo por primera vez en 20 años en unas elecciones que la Unión Europea y muchos otros países de occidente condenan por su falta de libertad. Entre otras cosas, destaca la ausencia de la líder opositora y premio Nobel de la Paz Aung Suu Kyi, que permanece en detención domiciliaria.

La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, lamenta en un comunicado que los comicios no hayan cumplido con los estándares internacionales de libertad. Por su parte, Barack Obama, de visita en la India, ha declarado que han sido «de todo menos libres y justas».

una mujer votando
Foto:CC

Después de 20 años se han celebrado elecciones en Birmania. Ha sido bajo la sospecha de fraude por parte de la junta militar que gobierna.

Los resultados se conocerán a lo largo de la semana pero se espera que el vencedor sea el partido creado por los generales, el Partido de la Solidaridad y del Desarrollo de la Unión (USDP), a pesar de la impopularidad que tiene la Junta militar.

La jefa de la diplomacia de la Unión Europea, Catherine Ashton, ha lamentado que las autoridades birmanas «no hayan dado los pasos necesarios para garantizar un proceso electoral libre, justo e inclusivo». Ha agregado que en muchos aspectos estas elecciones «no son compatibles» con los estándares internacionales, sobre todo en lo que se refiere a los grupos de la oposición. La líder de la Liga Nacional por la Democracia (NLD), la premio Nobel de la Paz Aung Suu Kyi, lleva en arresto domiciliario los últimos 15 años.

De los 29 millones de ciudadanos con derecho a voto unos dos millones no han podido hacerlo. En unas 3.500 aldeas se han suspendido los comicios por seguridad. Otros 650.000 birmanos están en campamentos de refugiados fuera del país.

Según la Constitución de 2008 un 25% de los parlamentarios deben ser militares en ejercicio. Otros partidos, que protege la Junta militar, se han nutrido de miembros del ejército que han renunciado a los galones para presentarse a las elecciones y ocupar los puestos reservados a los civiles.

La nueva Constitución quita de en medio a la oposición. Por una parte no puede ser candidato alguien que haya sido condenado por un Tribunal ni que haya contraído matrimonio con un extranjero. Suu Kyi estuvo casada con un médico británico. También prohíbe que participen en política miembros de órdenes religiosas. Los monjes budistas protagonizaron masivas manifestaciones contra el gobierno en 2007.

Aung Suu Kyi es la figura emblemática de la oposición birmana, fue la vencedora de las elecciones de 1990, que fueron anuladas por los militares. Desde entonces sufre un intermitente arresto en su domicilio. No le fue permitido visitar a su esposo enfermo terminal de cáncer en Reino Unido ni viajar a Oslo para recoger el premio Nobel de la Paz.