Porochenko apoyó la movilización de Euromaidán, ha sido ministro de Relaciones Exteriores y presidente del Banco Central con el gobierno de Viktor Yushenko. «La época en que los políticos mentían al pueblo y pasó», dijo al hacer pública su candidatura que fue respaldada por el ex boxeador Vitali Klischco, otra de las figuras relevantes de Euromaidán.
Aunque también formó parte del gobierno del destituido Yanukóvich, como ministro de Economía en 2012. Ese año fue elegido diputado como independiente y planeaba presentarse a la alcaldía de Kiev cuando la presidencia del país se cruzó en su camino.
Muchos ucranianos creen que su experiencia en los negocios y su participación en el gobierno podrán reactivar la maltrecha economía del país. Porochenko, comenzó vendiendo granos de cacao que le permitieron comprar varias fábricas de dulces que transformó en un emporio de las golosinas en Europa del Este. Según su sitio de internet produce 450.000 toneladas de golosinas.
Con el tiempo ha diversificado su negocio y ahora a sus 48 años tiene una fábrica de automóviles y autobuses, un astillero y un canal de televisión que ha sido clave en la campaña electoral. La fortuna del recién elegido presidente de Ucrania, se calcula en 1.300 millones de dólares, se ha visto afectada por la confrontación con Rusia que prohibió la importación de los chocolates Roshen.