El presidente checo, Vaclav Klaus, ha conseguido más atención mundial por lo que parece el pretendidamente disimulado robo de una pluma que por sus posiciones euroescépticas y peleonas en la Unión Europea. Durante una rueda de prensa televisada, junto al presidente chileno, Sebastián Piñera, Klaus representa toda la liturgia del disimulo para guardarse en un bolsillo la estilográfica que tenía encima de la mesa. Dicen que era un regalo, pero él lo ha convertido en un robo y en uno de los vídeos más vistos en internet.
Comparecían Klaus y Piñera ante los medios informativos y el presidente chileno daba una retórica bienvenida a su invitado. Las cámaras enfocan a la pareja de estadistas y mientras uno se dirige a los periodistas, el otro presta atención al estuche que tiene sobre la mesa con una pluma dentro, al parecer, con piedras semipreciosas.
Klaus parece encapricharse de la pluma. La saca del estuche, la observa juguetón, la pasa por debajo de la mesa hasta su bolsillo, vuelve a poner las manos sobre la mesa, cierra el estuche y aquí no ha pasado nada. Nada por aquí, nada por allá. Pura magia para diversión de los espectadores de la televisión checa primero y después de millones de internautas que están disfrutando del espectáculo.
Un portavoz de la presidencia checa se apresuró a decir que la pluma era un regalo de su anfitrión y que es un objeto común con un logo oficial. El propio Klaus ha dicho después que también tiene una pluma de la cumbre de la OTAN o una libreta de notas del parlamento lituano.
Como suele ocurrir en estos casos, su afirmación ha estropeado más aún su imagen. En la República checa se ha abierto una campaña en Facebook para que la gente contribuya a aumentar su colección de regalos públicos.