La baja participación y la sorpresa por el triunfo del opositor nacionalista Andrzej Duda, han sido los protagonistas de las elecciones presidenciales en Polonia. El líder del partido Ley y Justicia (PiS) habría ganado con apenas 2,6 puntos de diferencia al actual presidente, el conservador y europeísta Bronislaw Komorowski de Plataforma Cívica (PO), en la presidencia del país tras el fallecimiento de Lech Kaczyński, el 10 de abril de 2010 en un accidente de aviación.
Se trata además de la primera vez desde 2005 que Ley y Justicia, que tiene su bastión en el este de Polonia, la parte menos desarrollada y más rural del país, se impone a PO en unos comicios.
Duda ha ganado las elecciones en Polonia sin mayoría absoluta con el 34,8% de los votos, frente al 32,2% logrado por el actual presidente, Bronislaw Komorowski, apoyado por el PO. De nuevo las encuestas se han equivocado en los pronósticos, por lo que habrá segunda vuelta el próximo 24 de mayo. Los últimos sondeos daban a Komorowski, 5º presidente democrático de Polonia, un 40% en intención de voto frente al 30% de su principal competidor, Andrzej Duda.
El mensaje de Komorowski para estos comicios se ha basado fundamentalmente en su papel al frente de la seguridad nacional. Por su parte, Duda, de 42 años, ha hecho más hincapié en que la entrada de Polonia en el euro, algo a lo que se opone, hará que todos los productos se encarezcan.
Para Duda «el cambio en Polonia comienza con el cambio en la presidencia», mientras que Komorowsk, ve en estos resultados una clara advertencia al gobierno, «nos espera un trabajo duro, una lucha dura y, estoy seguro, también en la victoria». Una derrota de Komorowski en la segunda vuelta tendría consecuencias para la primera ministra, Ewa Kopacz, pocos meses antes de las elecciones parlamentarias. El puesto de presidente en Polonia no es solamente representativo. Tiene poderes que le permiten vetar leyes y promover otras.
Con un baja participación del 49,4%, inferior a las presidenciales de 2010 con un 54,9%, también cabe destacar el ascenso del debutante Pawel Kukiz, ex estrella de rock y considerado antisistema, que habría obtenido un importante 20,3% de los votos, muy por encima de lo que pronosticaban los sondeos. El electorado de Kukiz se prevé determinante en la segunda vuelta y ha asegurado hoy que no votará a ninguno de los dos aspirantes.
Mientras, en cuarta posición ha quedado Korwin-Mikke, polémico monárquico y también considerado antisistema, quien habría obtenido el 4,4% de los votos. Más abajo, el principal partido de izquierda en Polonia, la socialista SLD, Monika Ogórek, con apenas el 2,4% de los apoyos.