El nuevo gobierno griego tiene ya la confianza del Parlamento para negociar la entrega del tramo de rescate europeo suspendido tras la crisis política y el nuevo plan de ayuda de 130.000 millones de euros. El primer ministro, Lucas Papademos, tiene los votos de los socialistas, los conservadores y los derechistas.
De los 300 diputados que componen el Parlamento griego, 255 apoyaron al nuevo gobierno de unidad nacional. PASOK, Nueva Democracia y los ultraderechistas LAOS forman el nuevo ejecutivo y tienen una holgada mayoría en la cámara.
Ahora empieza el trabajo que el exprimer ministro Papandreu no fue capaz de llevar adelante: que la UE y el FMI desbloqueen los 8.000 millones de euros del primer rescate que permitirán a Grecia evitar una bancarrota inmediata y negociar ya con Bruselas y Washington el préstamo de 130.000 millones de euros para financiarse los próximos años.
Papademos y el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, se han reunido este miércoles en Atenas con el director general del Instituto Internacional de Finanzas, Charles Dallara, para estudiar la condonación del 50% de la deuda griega que está en manos de los bancos.