El británico Robert Edwards, de 85 años, que ha sido galardonado con el premio Nobel de Medicina, no se encuentra muy bien de salud. Su esposa ha transmitido que está "encantado" con el premio. En colaboración con el ginecólogo Patrick Steptoe, desarrolló una técnica en 1968 con la que consiguieron fertilizar óvulos fuera del cuerpo de la mujer e insertarlos de nuevo con éxito. Diez años más tarde nacía la primera «niña probeta», Louise Brown.
Edwards y Steptoe, que murió en 1988, tuvieron muchos problemas con la iglesia, la opinión pública o el Gobierno que les negó fondos. Pero se las arreglaron para conseguir dinero privado con el que fundar la primera clínica de fertilidad del mundo, Bourn Hall, en Cambridge, en la que perfeccionaron el procedimiento que ha traído al mundo a unos 4 millones de niños.
El director técnico de la clínica ha dicho que Edwards ha sido una persona muy avanzada para su tiempo, puesto que hablaba de «embriones congelados o cultivo de blastocistos mucho antes de que la gente pensara que estas técnicas científicas pudieran ser realidad».
El Nobel de Medicina, está dotado con 10 millones de coronas suecas (más de 1 millón de euros) Es el primero del año en hacerse público, le seguirán los de Física, Química, Literatura y de la Paz.