«Cruzamos la meta, nos alejamos unos 300 metros, y de repente escuchamos dos explosiones. Pensamos que una estructura grande había caído al suelo y de ahí el sonido. Nadie pensaba que podría ser lo que ha sido», ha explicado a un medio de comunicación el estudiante español León González, que participaba en el Maratón de Boston.
En torno a las 15.00 de la tarde (las 21.00, en hora peninsular española) explotó la primera bomba. Minutos después, se escuchó la segunda detonación. Una tercera explosión se produjo a varios metros de allí, en una biblioteca. Cerca de 20.000 personas estaban inscritas para participar en esta edición del maratón más antiguo de su categoría y uno de los más famosos en todo el mundo. El Maratón de Boston se celebra el Día de los Patriotas, el tercer lunes de abril, desde 1897. El evento, que comienza en Hopkinton, Massachusetts y la Plaza de los extremos de Boston Copley, atrae a medio millón de espectadores cada año. La tragedia podría haber sido mucho mayor.
Europa extrema sus medidas de seguridad
Las condolencias llegan a Boston desde todos los rincones del mundo. El presidente del Consejo europeo, Herman van Rompuy ha manifestado: «Condeno los abominables actos ocurridos, lamento profundamente el trágico resultado y la pérdida de vidas inocentes». También han enviado su pésame el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schultz, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso y la Alta representante Catherine Ashton.
Por su parte las ciudades que serán próximamente capitales deportivas ponen en alerta a sus fuerzas de seguridad. Así ocurre en varias ciudades europeas.
En Londres celebran su maratón este próximo domingo, por lo que la atención es máxima. Se ha hablado ya con las autoridades para endurecer las medidas, pero la competición se celebrará tal y como estaba previsto, dijo a los medios de comunicación británicos el jefe de la organización, Nick Bitel.
«Estamos muy tristes y consternados por las noticias de Boston», dijo Bitel. Es «un día muy triste para el atletismo y nuestros amigos de la carrera del maratón». La carrera, que visitan cada año cerca de 500.000 personas, atraviesa el centro de Londres y numerosos puntos turísticos. Habitualmente asisten como espectadores medio millón de personas.
La reacción de Rusia, que acoge en Moscú el mundial de atletismo, ha sido más polémica ya que el ministro de Deportes ruso, Vitali Mutkó, ha asegurado hoy que el atentado terrorista del maratón de Boston es un «serio aviso» para ellos.
En los próximos meses Rusia acogerá, entre otras, las Competiciones Universitarias de Verano (Kazán), los Campeonatos Mundiales de Atletismo (Moscú) y los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014 (Sochi).
Mutkó ha asegurado que el ataque en Boston no modificará los planes de las autoridades rusas, que han adoptado todas la medidas para garantizar la seguridad de los acontecimientos deportivos.
La televisión alemana ha entrevistado hoy a los organizadores del maratón de Berlín, que aseguraron que ahora tendrían que revisar también sus planes de seguridad.
Asimismo, Francia ha elevado este martes el nivel de alerta de seguridad en el país, informó el ministro del Interior, Manuel Valls. El ministro ha indicado a las autoridades policiales regionales que hagan más patrullas de las habituales y que haya una mayor vigilancia en los edificios y lugares públicos. Valls pidió a los ciudadanos que estén especialmente atentos ante objetos sospechosos.
España, por su parte, permanece atenta a las noticias que le llegan de los 91 participantes españoles en la carrera de Boston. El Ministerio de Asuntos Exteriores no tiene constancia de que haya ciudadanos españoles afectados por las dos explosiones registradas durante el maratón y se mantiene en contacto con las autoridades para informar de cualquier novedad al respecto.
El mundo del deporte se vuelca con Boston
La Federación Internacional de Atletismo (IAAF) ha querido mandar su pésame a los familiares de los fallecidos y su apoyo a heridos en el maratón y se ha mostrado «conmocionada y consternada» por el trágico suceso.
«La Federación Internacional de Atletismo, junto con la comunidad mundial del atletismo, está conmocionada y consternada por los trágicos acontecimientos que se han producido en Boston con motivo del maratón anual de la ciudad», según el comunicado hecho público por el organismo. «El deporte del atletismo ofrece su más sentido pésame y condolencias a los familiares y amigos de los fallecidos y heridos en este incidente horrendo», indica.
Por último, condenó el hecho, sea cual sea el origen y la intención del mismo. «Si bien la causa de la explosión aún no se ha confirmado, la IAAF condena este atentado», finaliza.
Deportistas de todo el mundo han utilizado las redes sociales para mandar un mensaje de apoyo a los familiares de las victimas del Marathon de Boston. Es el caso de Pau Gasol, de José Manuel Calderon o de Jorge Lorenzo.
La investigación sigue sin pistas
La Policía de Boston mantiene bajo custodia a una persona en régimen de 'person of interest' (posible sospechoso) por supuesta vinculación con las dos explosiones registradas este lunes, según ha informado la cadena de televisión Fox.
«Las autoridades están custodiando a una persona en un hospital local», ha informado la cadena, que cita fuentes no identificadas. Las fuentes han asegurado que el posible sospechoso tiene 20 años y ha sufrido graves quemaduras pero todavía no han podido determinar si es una víctima o ha sido uno de los autores del atentado.
La Policía Federal estadounidense (FBI) está, de momento, analizando el caso como si se tratara de una investigación sobre terrorismo, y evalúa los vídeos de las cámaras de vigilancia situadas cerca de la meta del maratón para tratar de esclarecer lo sucedido.
Ya ha confirmado que las bombas que estallaron eran de pequeño tamaño y escasa potencia y todo apunta a que se trata de artefactos explosivos artesanales, según han informado fuentes del FBI a la cadena de televisión CNN.