El primer informe de la Comisión Europea con los resultados que se han alcanzado hasta ahora señala que se han registrado algunos avances en sectores como la contratación abierta y equitativa de investigadores o la mejor difusión de los conocimientos científicos, pero todavía quedan muchas cuestiones sin resolver.
El objetivo del Espacio Europeo de Investigación es facilitar la circulación, la competencia y la cooperación transfronterizas de los investigadores, los centros de investigación y las empresas para consolidar los sistemas de investigación de los Estados miembros. Y eso no está cerca de conseguirse.
El informe señala puntos débiles como la diferencia entre la inversión pública en I+D y el gasto público global en algunos países europeos. El gasto público en investigación ha ido disminuyendo en la UE desde 2009. En estos momentos está en el nivel más bajo desde 2002, mientras que en varios estados el gasto total del país está creciendo.
También que las normas nacionales que se aplican en la presentación de informes no son las mismas entre los Estados miembros y eso dificulta la cooperación entre los diferentes centros de investigación.
Otros problemas son que algunos países aplican tarifas muy elevadas por la utilización de algunas infraestructuras como láseres intensos o telescopios muy grandes a los investigadores de fuera.
Respecto a la contratación las prácticas que se aplican no son abiertas, transparentes ni están basadas en el mérito. Un ejemplo es que más de la mitad de las vacantes no se publican a nivel europeo a través del portal de empleo EURAXEES que cada vez adquiere más importancia. De los 7.500 puestos de trabajo que se anunciaban en 2010 ha llegado a los 36.500 en 2012.
Hay relativamente pocos investigadores empleados en la industria en Europa, por lo general no están suficientemente preparados para el mercado laboral. En la UE sólo el 45 por ciento de los investigadores está empleado en la industria en contraste con el 78 por ciento en los Estados Unidos, el 74 por ciento en Japón o el 62 por ciento en China.
En cuanto a la igualdad de sexos este es uno de los sectores en el que menos se ha avanzado. Persiste mucha desigualdad lo que significa «que se desaprovecha el talento de las investigadoras». En 2010 las mujeres representaban sólo el 19,8 por ciento del personal académico de mayor edad; el 15 por ciento de los jefes de instituciones, y el 10 por ciento de los rectores en el sector de la educación superior.
La información con la que se ha elaborado el informe procede de distintas fuentes, entre ellas los programas nacionales de reformas de 2013, las organizaciones financiadoras y ejecutoras de la investigación y el informe 2013 relativo a los investigadore.