Veolia Environnement y el Ministerio iraquí de Municipios y Obras Públicas han firmado un acuerdo para la construcción de una planta desaladora en Basora, Irak. El contrato, que también contempla la operación de la planta a cinco años, tiene un valor acumulado de 115 millones de dólares americanos.
Veolia, en asociación con la japonesa Hitachi y la firma de ingeniería egipcia ArabCo, construirá y operará esta planta desaladora que contará con las tecnologías de ósmosis inversa y ultrafiltración. Con una capacidad de producción de 200.000 metros cúbicos al día, la nueva instalación permitirá suministrar agua potable a los 2,3 millones de habitantes de la ciudad de Basora. Además, teniendo en cuenta la escasez crónica de electricidad del país, la planta desaladora será totalmente autónoma ya que tendrá sus propios generadores de electricidad que garantizarán la continuidad del servicio.
Las obras de construcción comenzarán en el primer trimestre de 2014 y se prolongarán durante 30 meses. Este contrato va a contribuir a la creación de 300 puestos de trabajo asociados a la construcción de la planta, proporcionados por ArabCo, y 50 para su operación durante cinco años.
Los recursos hídricos limitados de Irak y el conflicto sobre su uso, han hecho del agua un recurso fundamental para el desarrollo del país, especialmente en el sur. La principal fuente de suministro en esta parte de Irak proviene del Éufrates - que tiene un alto contenido en sal – y del agua del Golfo Pérsico.
Según declaraciones de Antoine Frérot, Presidente y CEO de Veolia Environnement «este nuevo contrato es una prueba más de la capacidad de Veolia para ofrecer soluciones concretas y fiables a la escasez de los recursos hídricos y a los desafíos que enfrentan las grandes ciudades, especialmente en países donde el agua es crucial para el desarrollo económico. Estoy muy satisfecho de que Veolia haya sido elegida por las autoridades iraquíes para apoyar la modernización de Basora y que la empresa demuestre su capacidad para hacer frente a los retos de esta ciudad, una importante referencia de la industria del petróleo y el gas.»
Como parte de su reconstrucción, Irak ha puesto en marcha varios planes nacionales destinados a la modernización de los servicios básicos tales como el agua, las aguas residuales, el tratamiento de residuos y la energía, con el fin de apoyar su crecimiento económico. Con el único acceso del país al mar, Basora es objeto de especial atención por parte del gobierno iraquí, que está modernizando esta ciudad portuaria para acelerar su crecimiento económico.
«Esta planta es parte de un plan para rehabilitar y ampliar las plantas de tratamiento de agua de la ciudad. La tecnología innovadora y las soluciones que estamos proporcionando a Basora permitirán a sus ciudadanos mejorar el acceso a agua de calidad al mismo tiempo que se protegen sus recursos», ha declarado Jean- Michel Herrewyn , Director de Global Enterprises de Veolia Environnement.