La crisis griega y sus secuelas sobre todos los países de la zona euro, aplicados ahora en aprobar duros planes de ajuste, ha puesto a la UE a las puertas de una de las crisis más graves de su historia. El Consejo Europeo que se reúne este jueves en Bruselas debe dar respuesta a los mercados y a los ciudadanos con una UE unida y eficaz para hacer frente al déficit e instaurar una política económica coordinada entre los 27.
El Consejo tiene previsto aprobar, por fin, la estrategia 2020 de crecimiento y empleo, que basa la actividad de la UE en los próximos diez años en el empleo, la investigación, la energía y la lucha contra el cambio climático. Hasta ahí hay consenso. La mejora del nivel de educación y la lucha contra la pobreza son temas que quedaron pendientes por falta de acuerdo y que hoy deberían cuantificarse. Se espera un compromiso para sacar a 20 millones de personas de la pobreza y para recortar el abandono escolar hasta menos del 10% con un 40% de jóvenes que tengan estudios superiores.
En el proyecto de conclusiones de la cumbre se habla de garantizar la sostenibilidad fiscal. No se hace referencia a ningún país, pero se dice que el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, defenderá la solvencia de España ante los rumores reiterados de la prensa alemana.
Una política económica coordinada
El presidente estable de la UE, Herman Van Rompuy, informará de los avances logrados por el grupo que él dirige para incrementar la coordinación de políticas económicas de la UE, se estudiará la posibilidad de que Bruselas supervise los presupuestos nacionales y el endurecimiento de sanciones para los países que no cumplan el Pacto de Estabilidad.
El Secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, defendió ayer en el Parlamento europeo las líneas de actuación que, según la presidencia española, deben seguirse conta la crisis: consolidación fiscal, mayor regulación y supervisión de los mercados financieros, estrategia de crecimiento para recuperar competitividad y gobernanza económica.
El Consejo también debatirá la posición que la Unión llevará a la próxima cumbre del G20 en Toronto, donde la UE defenderá la implantación de una tasa para la banca que sirva para costear futuras crisis financieras.
La cumbre tiene en su agenda además el cumplimiento de los objetivos del milenio, la posición europea en la cumbre de cambio climático en Cancún, el pacto europeo sobre inmigración y asilo, las negociaciones de adhesión de Islandia, la entrada de Estonia en la zona euro y el aumento del número de diputados en la Eurocámara. euroXpress