El presidente de la Generalitat rubricó el texto en un acto solemne rodeado de los representantes de los partidos que respaldan el referéndum. «Acabo de firmar el decreto de convocatoria que debe hacer posible que el próximo 9 de noviembre podamos pronunciarnos sobre el futuro político que queremos para nuestro país», anunció Mas, tras la firma del decreto.

«A nadie puede asustarle que alguien exprese su opinión (...) Cataluña quiere hablar, quiere ser escuchada, quiere votar», agregó hablando en castellano. También se puso en marcha un marcador digital con la cuenta atrás hasta el 9 de noviembre.

La consulta tendría dos preguntas: ¿Quiere que Cataluña sea un Estado?, quien conteste de forma afirmativa a esta primera podrá contestar la segunda, ¿quiere que sea un Estado independiente?»

La firma del decreto se ha producido ocho días después de que el Parlamento de Cataluña aprobara por amplia mayoría la ley de consultas que proporciona un marco legal a la convocatoria y, un día después de que el ex presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, compareciera ante la Comisión de Asuntos Institucionales para dar una explicación sobre el dinero que durante 30 años ha tenido en el extranjero.

Por su parte el Gobierno, con su presidente Mariano Rajoy paseando por la Muralla China, esperaba que se produjera ese acto para recurrir la ley de consultas y el decreto de convocatoria del referéndum que considera ilegal.

Artur Mas, no ha dicho que hará si, como es previsible, el Tribunal Constitucional declara la consulta contraria a la Constitución. Mientras, Esquerra Republicana (ERC) hace un llamamiento a la desobediencia civil, un camino que no parece que Mas vaya a secundar. Los analistas políticos señalan que podría adelantar las elecciones esperando que los partidos independentistas resulten ganadores.

Por el momento, este lunes, presidirá la presentación del Libro Blanco de la Transición Nacional (la catalana), en el que se han reunido los 18 informes que ha hecho el Consejo Asesor por la Transición Nacional (CATN) sobre el proceso soberanista.

El CATN, es un órgano consultivo creado por el Govern en 2013 y formado por 15 miembros. Desde su creación ha ido haciendo diversos informes sobre el proceso hacia la independencia. Seguridad social, defensa, relaciones comerciales entre un futuro Estado catalán, el resto de España y la Unión Europea, autoridades reguladoras, y las estructuras administrativas que deberían crearse para cumplir la normativa europea e integrarse en la comunidad internacional.

Entre las conclusiones está que, el PIB caería hasta un 2 % debido a un posible boicot de el resto de España que provocaría la pérdida de entre 4.500 a 5.000 millones de euros al mes. El informe prevé que esas pérdidas se costearían por medio de créditos, emisiones de deuda o 'bonos patrióticos'.

Otra de las conclusiones es que el nuevo Estado catalán debería fomentar las relaciones con EE UU, la Organización de Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) y valorar el papel que tiene en la actualidad la OTAN.

Los informes calculan que la Seguridad Social, sería viable y detallan los procesos que Cataluña debería seguir para solicitar el ingreso en organismos como la ONU, el FMI, el Banco Mundial, agencias de la ONU como la FAO, la OMS, la UNESCO y el Consejo de Europa entre otros.

En lo que se refiere a la adhesión a la UE, los expertos dicen que Cataluña cumple 31 de los 34 requisitos necesarios y sea o no miembro de la Unión son partidarios de que la moneda continúe siendo el euro.

En cuanto al Gobierno de Mariano Rajoy, impugnará la convocatoria apoyado por el principal partido de la oposición, PSOE, y el lunes celebrará un Consejo de Ministros extraordinario. Cuando el Gobierno presente el recurso ante el Tribunal Constitucional, este paralizará la ley catalana y la convocatoria quedará invalidada.