Green eMotion servirá para comprobar la utilidad y el funcionamiento del coche eléctrico en las ciudades. En el proyecto van a participar hasta 42 partes, entre industria, administraciones públicas, universidades y centros de investigación. Empresas como Iberdrola o Endesa, entre otras eléctricas, o fabricantes como BMW, Daimler, Micro-Vett, Renaul y Nissan y las autoridades municipales de Madrid, Barcelona, Málaga, Roma o Berlín.
El responsable de Transporte de la Comisión Europea, Siim Kallas, ha advertido que la situación actual de dependencia del petróleo es insostenible. El 96% del transporte depende de ese carburante.
El objetivo de la UE es reducir al menos en un 60% las emisiones del transporte para 2050. En ese momento se pretende que no circulen por el centro de las ciudades europeas vehículos alimentados con gasolina o gasoil.
El proyecto Green eMotion pretende crear mil puntos de recarga en Madrid, Málaga y Barcelona y promocionar un sistema unificado. «No tiene sentido tener un sistema distinto en cada país» dicen en Bruselas y explican que el objetivo es que la recarga sea tan sencilla como en los actuales vehículos de diesel o gasolina.