Por vigesimoprimer mes consecutivo, el Banco Central Europeo ha decidido mantener los tipos de interés invariables, al 1%, su mínimo histórico. El alza de precios que ha llevado la inflación de la zona euro hasta el 2,4% no es relevante, según su presidente, Jean-Claude Trichet.
El BCE considera que los precios han subido por las presiones del precio de la energía y las materias primas y que eso no supone ninguna amenaza importante ni es significativo para la política monetaria de la entidad.
La decisión de la entidad financiera europea ha sorprendido a los inversores, porque la tasa de inflación de la zona euro está desde hace dos meses por encima del objetivo del propio BCE, de situarla por debajo del 2%.
Sin embargo, Trichet cree que las expectativas de inflación continúan «firmemente ancladas», según los objetivos de la institución, pero admite que se está prestando gran atención a la evolución de los precios. «Lo que cuenta no es la inflación inmediata, sino sobre un horizonte a medio plazo... Un desanclaje de las expectativas de inflación daría lugar a un escenario menos favorable para la economía y la creación de empleo».