El continente europeo es una de las zonas desde las que se podrá contemplar este viernes el paso del asteroide, 2012DA14, que casi rozará la Tierra. Alcanzará su máxima aproximación sobre las 18,30 hora peninsular española. Durante tres horas entre las 17,00 y las 21,30 alcanzará el brillo máximo y será visible en una amplia zona del planeta que incluye Australia, centro y oeste de Asia, grandes áreas de África y toda Europa.

Un objeto de un tamaño tan grande que pase tan cerca de la Tierra no se ha observado muchas veces, solo pasa uno cada 40 años. Tampoco es fácil que se acerquen más o que incluso pueda llegar a chocar, la media en este caso sería de una vez cada 1.200 años.

El asteroide tiene entre unos 40 a 50 metros de diámetro, y cuando decimos que casi rozará la Tierra, queremos decir que en el espacio eso significa que pasará a una distancia de unos 27.700 kilómetros de la superficie terrestre a una velocidad de cerca de 28.000 kilómetros por hora. Es el asteroide que pasará más cerca de nosotros desde que se pueden predecir las órbitas de estos objetos celestes. En realidad pasará a menos distancia de lo que orbitan los satélites que predicen el tiempo, que están situados a unos 35.800 kilómetros.

En España el Instituto Astrofísico de Canarias (IAC) realizará el seguimiento a través de diez de sus telescopios situados en diferentes puntos de Canarias y de la Península. Como ellos mismos dicen en su página web http://www.iac.es/ «si se cansan del carnaval» pueden ver el asteroide en línea.

Desde el Observatorio del Teide, el telescopio OGS de la Agencia Espacial Europea (ESA) retransmitirá el paso del asteroide en directo, también podrá seguirse a través del proyecto europeo de ciencia ciudadana, Gloria, a partir de las 19,00 hora local canaria, las 20,00 en España. El 2012DA14, fue descubierto por un observatorio robotizado que está en la sierra de La Sagra en Granada.

La última vez que cayó en la Tierra un asteroide de unos 10 kilómetros de diámetro fue en el Cretácico, hace 65 millones de años, y podría haber sido la causa de la extinción de los dinosaurios.