Draghi, Super Mario, ha sorprendido en su primera reunión al frente del Consejo de Gobierno del BCE. Se ha adelantado a las previsiones de la mayoría de los analistas con esa bajada de tipos que se esperaba en diciembre.
La inflación en la eurozona se manteiene estable en el 3%, un punto más del objetivo del BCE, pero las previsiones de recesión son fuertes. La OCDE había pedido una medida así ante las negras perspectivas de crecimiento en la eurozona.
El Banco Central Europeo ha subido dos veces los tipos este año, después de haberlos mantenido en el 1%, su mínimo histórico desde mayo de 2009.
La rebaja de este jueves responde, según Draghi, al elevado nivel de incertidumbre sobre el crecimiento económico de la eurozona, por el que el Consejo de gobierno del BCE ha decidido «por unanimidad» actuar. «En este entorno, deberían moderarse las presiones sobre los precios, los costes y salarios en la zona del euro; la decisión de hoy tiene en cuenta esto», ha dicho.
