Divergencias en la economía europea

Cada reunión de los ministros de Economía de la UE levanta expectativas y cada reunión defrauda por falta de medidas concretas. Este lunes, los 27 no decidieron o no desvelaron los esperados planes de rescate financiero para Grecia, en caso de que sean necesarios.

Entre tanto, cuando se habla de gobierno económico europeo y de rumbo unitario, Francia reprocha a Alemania sus métodos para impulsar el crecimiento y el comisario Almunia vuelve a meter el dedo en el ojo español, al decir que el programa de estabilidad presentado por Zapatero puede pecar de cierto optimismo.

Hoy, si hay acuerdo, el Ecofin tiene previsto pedir a los socios más coordinación para salir de la crisis.

Elena Salgado y Giorgos Papaconstantinou, ministros de Finanzas de España y Grecia / Foto:UE

El misterio sobre lo que hará la UE en caso de que Grecia necesite dinero para afrontar su crisis financiera se prolonga. Los ministros de Finanzas de los 27 han dicho este lunes que hay un acuerdo de base para actúar, pero no han dicho en qué consiste.

El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, tan sólo ha aclarado que el mecanismo de salvamento no incluirá la deuda griega y que en él participarán todos los países de la eurozona. Juncker ha añadido que será una acción coordinada que podrá activarse rápidamente si es necesario, pero la conclusión final queda para los jefes de Estado o de gobierno de la UE en su reunión de finales de este mes de marzo.

La falta de definición ha provocado una caída del euro frente al dólar porque los inversores esperaban noticias concretas.

Divergencias económicas entre París y Berlín

La reunión además debe haber sido tensa porque los ministros han llegado al Consejo, con unas declaraciones de la titular francesa, Christine Lagarde, en las que culpa a Alemania de los desequilibrios en la zona euro. Según ha dicho al Financial Times, Berlín basa sus superávit comerciales en incrementar la competitividad por la contención de costes laborales, y eso no parece a la ministra francesa que vaya en la deseada dirección de la convergencia.

Por si fuera poco, Lagarde rechazó también, junto a otros socios, la propuesta del ministro alemán, Wolfgang Schäuble, de crear un Fondo Monetario europeo, similar al FMI.

Almunia advierte sobre las previsiones españolas

La ministra española Elena Salgado, que preside el Eurogrupo, tampoco debía estar muy cómoda. El comisario de Competencia, Joaquín Almunia, volvía a ser crítico con el gobierno de Zapatero. Almunia decía ayer en Madrid que las previsiones macroeconómicas que el ejecutivo español ha incluido en el programa de estabilidad remitido a Bruselas podrían pecar de cierto optimismo en las cifras esperadas a partir de 2011.

Salgado ha salido del paso al señalar que es la opinión de un comisario y no de la Comisión en su conjunto. Sin embargo, el equipo de Barroso tiene previsto aprobar este miércoles el dictamen sobre el plan español y, según algunas fuentes, va a seguir las indicaciones ya apuntadas por el Banco Central Europeo en su último boletín, en el que pedía a España que concrete las medidas para contener el déficit.

Hoy, Ecofin

Con el patio económico así de revuelto, tampoco se esperan grandes decisiones en la reunión que mantienen este martes los ministros de Finanzas de la zona euro. Salgado quiere impulsar una directiva para regular los fondos de alto riesgo, los hedge funds, que Estados Unidos califica de proteccionista.

Si hay acuerdo, entre las conclusiones debería figurar una petición para que se vigilen más de cerca los desequilibrios macroeconómicos entre los Estados miembros y que haya una coordinación más estrecha de las estrategias de salida.

No todo fue rematadamente malo este lunes. Eurostat anunció que el paro amortiguó su caída en el último trimestre de 2009. Aumentó un 0,2 % en la zona euro, un 0,3 % en el conjunto de los 27 y un 0,8% en España. El año pasado más de cuatro millones de personas perdieron su empleo en la UE.