Por tercer año consecutivo, Noma se lleva el primer premio, que supone una proyección internacional de primer orden. Ochocientos líderes internacionales en la industria de la restauración han apostado por esta casa danesa «de extraordinario pedigrí, donde la pasión y la honestidad se reflejan en cada bocado». Se destaca la innovación e inventiva que Noma ha introducido en el mundo culinario.
El chef de Noma, René Redzepi, ya desbancó el año pasado a El Bulli, de Ferrán Adriá, no incluido en esta edición por su anunciado cierre. Pero los españoles siguen dominando la lista de los mejores del mundo. El segundo y tercer puesto lo ocupan respectivamente, El Celler de Can Roca, del catalán Joan Roca, y Mugaritz, del vasco Andoni Luis Aduriz. Además Arzak está en el puesto octavo y la hija del cocinero vasco, Elena Arzak, ha sido elegida mejor cocinera del mundo. En la categoría de hombres, ganó Massimo Bottura, de la Osteria Francescana de Módena, que ocupa el cuarto lugar en la lista general.
La crisis no afecta a la gran cocina internacional. El director de Restaurant, William Drew, ha declarado que «los restaurantes españoles dominan» y que «este año ha traído una apasionante lista de restaurantes que abarca una superficie geográfica todavía mayor y reconoce la influencia de naciones culinariamente en ciernes, como Perú y Rusia».Aunque siempre controvertida, la lista de The world's 50 best restaurants marca la pauta de la nueva cocina internacional.