Demasiado optimismo en la recuperación económica

Bruselas critica la falta de medidas concretas para reducir el déficit

La Comisión europea ha evaluado los programas de estabilidad y convergencia de 14 países de la UE y ha habido suspenso general. La mayoría de los Estados, que están sometidos a un procedimiento por déficit excesivo, han sido excesivamente optimistas en sus cálculos de crecimiento y casi todos son demasiado ambiguos en las medidas concretas que tomarán después de 2011.

Bruselas pide al gobierno español que precise su estrategia presupuestaria, que mejore el sistema de pensiones de jubilación y la calidad de las finanzas.

Volver al 3% de déficit público a partir de 2013 es el objetivo y la obligación de los estados miembros de la UE comprometidos con el Pacto de Estabilidad. La crisis económica y financiera abrió un paréntesis en el cumplimiento de lo acordado por los 27, pero es hora de recuperar la estabilidad económica.

Sin embargo, los planes de ajuste presentados por los socios comunitarios no cumplen las expectativas que Bruselas espera. Hoy ha hecho pública su evaluación y ha dado un varapalo general. Las hipótesis de crecimiento se sustentan en previsiones optimistas y los resultados pueden ser peores de lo previsto. Además, los planes presentados no tienen suficiente respaldo con medidas concretas a partir de 2011.

El Comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, ha dicho que los programas evaluados hoy se articulan en torno a dos ejes: las medidas de estímulo establecidas para atajar la espiral descendente de la economía y la estrategia presupuestaria para salir de la crisis acordada a finales del año pasado. Nuestra conclusión es que la estrategia de salida adoptada por el Consejo se está aplicando: en términos generales, en 2010 se mantendrán las medidas de estímulo, y en 2011 se emprenderán ambiciosos esfuerzos de saneamiento. Los principales riesgos a que se enfrenta el proceso de saneamiento radican en unas hipótesis macroeconómicas un tanto optimistas y en la falta de precisión de las medidas de saneamiento.

Las cinco economías mayores de la zona euro, Alemania, Francia, Italia, España y Holanda, hacen unos pronósticos sobre ingresos fiscales que podrían ser menores a lo previsto y, por tanto, dificultar el cumplimiento de los objetivos. Reino Unido se lleva críticas mayores, porque, según Bruselas, el gobierno británico ni siquiera prevé la reducción de su déficit a los límites establecidos. Londres debe fortalecer el ritmo de su consolidación a medio plazo a fin de cumplir el objetivo de situarlo por debajo de 3.% .

España, bien pero no tanto

La Comisión considera que las medidas de ajuste presentadas por España para 2010 van en la buena dirección, pero no ha detallado suficientemente sus planes a partir del año que viene, cuando deba acelerarse el saneamiento de las cuentas públicas.

Según el portavoz de Asuntos Económicos, Amadeu Altafaj, la estrategia presupuestaria podría no ser suficiente para devolver el nivel de deuda a una senda descendente. La deuda pública, inferior al 40% del PIB en 2008, aumentó al 55% del PIB en 2009 y seguirá subiendo hasta llegar al 74% del PIB en 2013 y su evolución podría ser peor de lo esperado.

Por tanto, entre otras cosas, la Comisión reclama a España que reforme su sistema de pensiones para garantizar la viabilidad a largo plazo de sus finanzas públicas.

Así que la recomendación de Bruselas, como ya adelantó en Madrid el comisario Almunia, es de menos optimismo. Bruselas alerta además de que la consolidación fiscal emprendida por el Gobierno está en riesgo por el retraso en la reestructuración de la banca y por el déficit de las comunidades autónomas y los ayuntamientos. Por ello, insiste en que todos los niveles de la administración deben contribuir al ajuste.

La crisis puede afectar al crecimiento potencial a medio plazo debido a una menor inversión, a una menor disponibilidad de crédito y a un aumento del paro estructural....en cualquier caso España está en un proceso de consolidación fiscal creíble y sólido que responde a las exigencias de la Comisión, ha señalado Altafaj. euroXpress