El redoble de las campanas ha acompañado a los coches fúnebres por las calles de Cracovia hasta la Basílica medieval de Santa María, ante el mayor altar gótico de Europa, donde ha tenido lugar el funeral. El trayecto hasta la iglesia estaba marcado por los lugares clave en la vida del matrimonio Kaczynski. Una multitud ondeaba banderas polacas y lanzaba flores al paso del cortejo fúnebre.
Miles de ciudadanos se han trasladado a la ciudad de Cracovia en autobuses, trenes o coches desde todos los rincones del país para asistir al entierro del que fue su presidente. En la ciudad se habían instalado grandes pantallas para que se pudiera seguir el oficio fúnebre desde la calle.
Tras el funeral, una procesión por la muralla del castillo de Wawel llevó los cuerpos hasta la catedral de San Estanislao y San Wenceslao, donde han sido recibidos con una salva de 21 disparos.
Los féretros fueron depositados en sarcófagos especiales junto a los reyes de Polonia y los principales héroes nacionales de la historia polaca.
En la ceremonia han estado presentes Marta, hija única del matrimonio fallecido, Jaroslaw Kaczynski, hermano gemelo del presidente, el presidente en funciones, Bronislaw Komororowski y el primer ministro Donald Tusk. De los 98 jefes de Estado y de Gobierno que habían anunciado su presencia sólo 18 han podido asistir. La ceniza del volcán islandés había cerrado el espacio aéreo europeo. El presidente ruso, Dimitri Medvedev ha conseguido llegar así como el presidente del Parlamento Europeo el polaco Jerzy Buzek.
Lech Kaczynski, era un político controvertido. Ultraconservador, llegó al poder en 2005 junto a su hermano gemelo Jaroslaw, prometiendo una "revolución moral" que en algunos casos se convirtió en una purga. Su trágica muerte parece haber levantado una ola de simpatía hacia su figura de la que no gozaba en vida. Según las encuestas solo un 20% de la población apoyaba al presidente para las próximas elecciones que ahora se adelantarán , probablemente al 20 de junio. Lo que no se puede negar es que ante un episodio tan grave como el descabezamiento de las principales instituciones del país, Polonia ha reaccionado como ha dicho un diputado de la Plataforma Cívica «como una democracia consolidada. El país funciona»".