El viento de levante que complica mucho las condiciones del Mediterráneo no arredra a los que quieren llegar a Europa. Este fin de semana Salvamento Marítimo y Cruz Roja han rescatado a las 137 personas que llegaban a bordo de balsas neumáticas. Entre los rescatados mujeres embarazadas, un bebé y una niña.
Los rescates comenzaron desde la mañana del sábado, aunque la noche del viernes ya habían sido socorridas otras ocho personas. A primeras horas de la mañana el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo de Tarifa, comenzó a recibir llamadas alertando de la presencia de pateras en la zona.
En la primera operación fueron rescatadas 39 personas que iban en cinco pequeñas embarcaciones, entre los inmigrantes cuatro eran mujeres, tres de ellas embarazadas y una menor que tuvo que ser evacuada en helicóptero con síntomas de hipotermia severa.
Más tarde fueron rescatadas otras diez personas, una de ellas embarazada, a bordo de dos patera. A mediodía otras 20 personas, entre las que viajaba la madre de la niña que había sido evacuada anteriormente al hospital, otras tres mujeres y un bebé.
Por la tarde continuaron llegando los avisos de socorro. En total fueron rescatados otras 22 personas en 4 pateras. El fuerte viento de levante con rachas de fuerza 8, que equivale a vientos de entre 62 y 74 kilómetros por hora ha dificultado la navegación y los rescates.
En total entre la noche del viernes y el sábado Cruz Roja de Tarifa atendió a 92 personas, todas subsaharianas. Desde enero de este año la organización ha socorrido a 784 inmigrantes, un número muy superior al de años anteriores, en 2012 fueron 411 las atendidas y en 2011 fueron 440.
El viento de levante continúa y las operaciones de búsqueda también en previsión de que puedan localizarse más embarcaciones.
En la costa de Cádiz las llegadas se han multiplicado por tres, mientras que disminuye en Canarias y Levante. Los inmigrantes se juegan la vida en pequeñas balsas inflables para evitar depender de las mafias.