Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el próximo 8 de marzo, el presidente de la Comisión europea, José Manuel Durao Barroso, y la comisaria de Justicia, Viviane Reding, han presentado la Carta de las Mujeres, una iniciativa con la que se pretende llevar la igualdad de género a todas las políticas de la UE.
La propuesta se ha presentado, como suele pasar, con mucha pompa pero pocos detalles. La prioridad es reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres, que llega al 18 % en la UE, un punto menos en España. Reding ha dicho que estas diferencias, además de moralmente indefendibles, tienen un coste económico enorme. Si se eliminaran, aumentaría un 15 % el PIB de la UE.
Según una encuesta de Eurobarómetro, el 82 % de los europeos creen que deben tomarse medidas urgentes para reducir las desigualdades salariales. La Comisión se propone tomar la iniciativa, pero lo que anuncia son informes, medidas de seguimiento y concienciación y sanciones que no se especifican. Sin embargo, sus datos son contundentes. Un 22% de las mujeres europeas de más de 65 años corre riesgo de caer en la pobreza. En esa situación, sólo está el 16 % de los hombres.
Una de cada cuatro mujeres, víctima de violencia
El otro asunto que preocupa es la violencia de género. También aquí los datos que da la UE son alarmantes: un 25 % de las mujeres ha sido víctima de malos tratos alguna vez en su vida. Otra vez, mensaje de reprobación y labor de concienciación. Sin embargo, a la hora de adoptar medidas, las cosas cambian. Dos de las medidas propuestas por la presidencia española se han rechazado.
Habrá Observatorio europeo sobre Violencia contra las Mujeres, pero no como órgano independiente, como pretendía España, sino que las funciones de recopilar datos y fijar indicadores comunes las asumirán dos agencias europeas que ya existen: el Instituto Europeo de Igualdad de Género y la Agencia Europea de Derechos Fundamentales. Los ministros de Empleo y Asuntos Sociales de la UE darán el lunes el primer paso para ponerlo en marcha.
Otra de las prioridades de la presidencia española se viene abajo. No habrá de momento euro-orden de protección de víctimas de violencia de género. Según Reding, existen muchas dificultades técnicaspara que una medida dictada en un país sea válida en otro porque esas órdenes en algunos Estados miembros son materia penal, en otros civil e incluso en otros administrativo. Así que, dice la comisaria, que todavía hay que trabajar mucho sobre el tema y difícilmente se podrá aprobar en este semestre.
Por si quieren más datos que marcan la diferencia entre hombres y mujeres, una estadística que ha hecho pública hoy Eurostat, dice que las mujeres europeas viven 82 años y los hombres, 76. euroXpress