La planta Gemasolar de Torresol Energy representa uno de los hitos más importantes en la historia de la industria termoeléctrica. La audiencia de un reciente webinar desarrollado como parte de la cumbre internacional de CSP Today Sevilla 2011 en el que se debatió el futuro de la industria ha sido consciente de ello
Santiago Arias, Director Técnico de Operación y Mantenimiento de Torresol Energy, recuerda la reacción que produjo en la gente conocer los detalles de que su compañía estaba desarrolllando el primer almacenamiento termosolar hace seis años. «La mayor parte de nuestros competidores dijeron que nosotros estábamos locos por hacer algo que nadie nos estaba pidiendo», asegura.
Pero cómo los tiempos cambian, en una votación de la audiencia llevada a cabo durante un reciente webinar de CSP Today titulado: «Gemasolar: marcando un antes y un después en el desarrollo termosolar», el 86% de alrededor de 200 empresas del sector dijeron que el almacenamiento sería esencial para el futuro de la industria. El porcentaje restante opinó que esto dependería del mercado y, sólo el 3%, afirmó que no sería esencial. Una atmósfera de cambio en la que probablemente haya tenido mucho que ver la recién desvelada Gemasolar con 120 MWt y 19.9 MW.
En este sentido, Gemasolar, la primera planta comercial del mundo que utiliza receptor de sales fundidas y tecnología de torre central, representa una impresionante pieza de ingeniería.
Durante los 29 meses que costó construir la planta, los ingenieros tuvieron que abrir nuevos caminos diseñando el receptor, la bomba de sales fundidas y el vaporizador, entre otros elementos.
Orientar 2.650 heliostatos, de forma individual para concentrar la luz reflejada de 300.000 metros cuadrados de superficie reflectante, fue otro «pequeño problema», según Arias. Sin embargo, el resultado final pudo orientarles hacia dónde irían girando las cosas para la termoeléctrica.
El diseño de Gemasolar hizo posible enfocar la luz del sol a alrededor de 1.000 veces la intensidad en el terreno y calentar las sales fundidas desde una temperatura inicial de entre 270º y 300ºC hasta los 550° y 565°C.
Sales calientes
En este punto, Arias afirma que el funcionamiento de la turbina de Gemasolar depende esencialmente de la cantidad de sales calientes más que de la luz solar, así que la forma de operar se puede equiparar a una planta térmica tradicional.
La planta contiene suficiente sal para mover las 20MW turbinas de Gemasolar a pleno funcionamiento durante 15 horas sin necesidad de luz solar. Un hecho que da a la planta una producción neta anual de 110 GWh y alrededor de 6.500 horas de operación por año, suficiente para dar energía a 27500 hogares.
Pero además existen otras ventajas, «desde que la turbina no tiene que cerrarse frecuentemente su periodo de vida es probablemente más largo», dice Arias. De este modo, «la producción puede regularse en función de la demanda más que debido a la irradiación solar y la conversión de la energía es más eficiente debido a las altas temperaturas» y añade: «no teniendo líquidos en el campo solar se deben reducir las roturas o fugas, ahorrándose reparaciones o costes de mantenimiento».
Tras un periodo de dos meses de ajustes y pequeños retrasos, la planta se aprobó finalmente en julio.
Por el momento, Arias certifica que Gemasolar ya ha sido capaz de lograr «el 80% de éste teórico rendimiento máximo en práctica pese a las condiciones climatológicas del mes de septiembre e incluso teniendo en cuenta pequeños fallos que pueden producirse al principio».
«La planta tiene un rendimiento muy bueno,» recalcó Arias.
Como consecuencia del desarrollo de esta planta, el grupo español de ingeniería, SENER, el cual posee el 60% de Torresol Energy frente al 40% controlado por la compañía de energía renovable de Abu Dhabi, MASDAR, está considerando más plantas de torres.
Cilindro parabólica
Arias desveló que SENER actualmente tiene una cartera de 21 proyectos de energía termosolar en España y dos en EE.UU y que la mayoría de ellos utilizarán tecnología de cilindro parabólica. SENER ya ha vendido 1.550 km de colector cilindroparabólico, equivalente a una carretera de seis metros de ancho de cristales reflectantes móviles que llegaría de Madrid a Paris.
Sin embargo, la compañía también está considerando el diseño de una torre y almacén de doble tamaño que Gemasolar, con alrededor de 5.000 heliostatos produciendo 240 MWt. Esto podría resultar en economías de escala que pueden adelantar el viaje del almacenamiento de la termoeléctrica a la igualdad de suministro. Pero Arias advierte que «la reflexión de la luz desde varios kilómetros de distancia podría verse disminuida por el polvo y la polución de la atmósfera».
¿En qué cantidad podría ser más grande la torre y el almacén en la práctica?
Manuel Silva, profesor asociado de la Universidad de Sevilla y el copresentador de Arias en el webinar de CSP Today que tuvo lugar el pasado 19 de octubre y en el que se debatieron las perspectivas de la termosolar explica: «hay estudios para todos los gustos pero no creo que fuera razonable multiplicar el tamaño de las plantas ya existentes por 10, por ejemplo» y asegura que «hay un camino por recorrer en cuanto al tamaño del campo de heliostato que es lo que define una central termosolar de torre».
Lo que parece claro, sin embargo, es que el almacenamiento se considera indispensable para la termoeléctrica en el despegue de Gemasolar. Además, durante el webinar de CSP Today se mostró una abrumadora apuesta por las sales fundidas como medio de almacenamiento.
«Yo puedo ver posibilidades en otros medios» recalca Arias. «Pero lo que yo no veo como futuro son plantas sin almacenamiento porque entonces estarían compitiendo con fotovoltaicos (PV) y a largo plazo entiendo que el fotovoltaico será más económico que la termosolar».
Sin importar qué lejos esté la caída del precio de los paneles, sin embargo, Arias y otros defensores de CSP pueden al menos tener la seguridad de que esto será algún tiempo antes de que PV pueda emular a Gemasolar y comience con la distribución continua de energía noche y día.
El webinar «Gemasolar: marcando un antes y un después en el desarrollo termosolar» se llevó a cabo el pasado 19 de octubre como parte de la cumbre anual CSP Today Sevilla 2011.