Han tardado tres años en presentar su quinto disco de estudio y eso ha dado lugar a todo tipo de especulaciones, desde la muerte de éxito a los plagios o a pretendidas descalificaciones sobre su imagen de clase media.
El cantante Chris Martin ha dicho que ha sido refrescante empezar desde cero. «Hay tanta gente que ya tiene una opinión sobre nosotros que no tenemos nada que perder». Sobre lo escuchado hasta ahora de Milo Xyloto ha habido, como siempre, disparidad de opiniones. Si hay unanimidad en algo es en que es puro sonido Coldplay en una obra optimista, que además lleva el sello de garantía de Brian Eno. El primer single se estrenó en junio, Every Teardrop is a waterfall; y el segundo, en septiembre, Paradise.
El reto es grande después de que su último trabajo, Viva la vida or death and all his friends, vendiera casi 7 millones de copias y consiguiera tres premios Grammy. Así llegaron a los 50 millones de discos vendidos en todo el mundo y reventaron las lístas de éxito de Europa y Estados Unidos. Después de eso, cabe cualquier cosa... O nada. Martin ha vuelto a amenazar con que ésta puede ser la última obra del grupo.
De momento, el estreno de Milo Xyloto tiene todas las papeletas para ser sonado, nunca mejor dicho. Y especialmente para sus seguidores españoles. Coldplay lo presentan el miércoles en la Plaza de Toros de Las Ventas de Madrid, con las 17.000 entradas agotadas una hora después de ponerse a la venta.
No caben decepciones. El concierto podrá verse en todo el mundo en directo en streaming, a través de Youtube y en soportes móviles, con aplicaciones de Vevo y YouTube para iPhone, iPod, iPad y Android. Se encarga de la retransmisión Anton Corbijn, responsable de algunos de los mejores videoclips musicales de los últimos años, quien ya ha dicho que una plaza de toros es «una localización única para hacer algo grande».