La Comisión Europea rechaza de plano las previsiones de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) para retrasar un año más la rebaja en las tarifas de terminación, las que se aplican entre sí las compañías por las llamadas. Bruselas exige que se cumplan los plazos previstos para reducir en diciembre de 2012 unos precios que repercuten en el coste que pagan los usuarios de teléfonos móviles.

En un comunicado difundido este lunes, la Comisión da por suspendidos los planes de la CMT de retrasar la reducción de esas tarifas hasta enero de 2014 y da al regulador español de telecomunicaciones un plazo de tres meses para modificar su propuesta y ajustarla al Derecho de la UE.

La comisaria de Agenda Digital, Neelie Kroes, ha declarado que «los consumidores españoles no tienen por qué pagar más de la cuenta por las llamadas móviles, sobre todo en un momento de dificultades para la economía nacional. El sector ha tenido ya tres años para adaptarse y no se puede justificar otro año de demora». Efectivamente, en 2009 la Comisión Europea hizo una recomendación a los Estados miembros para que aplicaran unas tarifas de terminación orientadas a los costes en toda la UE a más tardar el 31 de diciembre de 2012.

Bruselas no acepta los argumentos de la CMT de que una fuerte reducción de precios en esa fecha tendría un impacto demasiado negativo en el sector y considera que el regulador español no tiene argumentos para justificar el retraso, que «podría significar un año más de precios innecesariamente elevados para los usuarios del móvil en España en un momento en el que los consumidores españoles ya se encuentran seriamente afectados por la crisis económica», dice la nota de la Comisión.

La nueva normativa sobre telecomunicaciones de la UE exige que los Estados promuevan la competencia, los intereses de los consumidores y el desarrollo del mercado único.