Barroso confía en que en2012 «demostraremos que la UE puede hacer lo necesario para restablecer el equilibrio adecuado en un mundo económico que no siempre nos da buenas noticias». Por tanto, habrá que ver si las medidas de supervisión del sistema financiero, la gobernanza económica y la vigilancia de las políticas nacionales son suficientes para evitar que los mercados sigan especulando con las economías de la eurozona.
Un optimista Barroso argumenta que se tienen las herramientas y ahora solo falta aplicarlas y hacer seguimiento, incluso adelantar las reformas necesarias para impulsar la creación de empleo.
En eso basa su estrategia, en que todas las instituciones de la UE trabajen unidas para, una vez estabilizada la economía, se trabaje por el crecimiento económico y la reactivación del mundo laboral. El planteamiento es muy ambicioso, desde proteger a los inversores y a los contribuyentes hasta garantizar la financiación del modelo europeo, con medidas sobre las pensiones o la lucha contra el fraude.
Consciente de que la crisis financiera ha alejado aún más a los ciudadanos del poder de Bruselas, se han reforzado las iniciativas sociales y se reafirma la apuesta por una economía verde e inteligente, con medidas para favorecer a las pymes, a los sectores más dinámicos o el empleo transfronterizo.
Un enorme catálogo de actuaciones que, sin embargo, suenan a demasiado conocidas y hay que hacer un esfuerzo de voluntad para creer que esta vez sí serán puestas en marcha, cuando la financiación no está garantizada y las previsiones de recesión acechan.
Bruselas repite que el mercado único europeo no está suficientemente explotado y que no se han aprovechado sus ventajas como vehículo de crecimiento y empleo. Así que se ha vuelto a escuchar la importancia de implementar la directiva de servicios o avanzar hacia el cielo único europeo o conseguir un espacio europeo de investigación.
En suma, pocas novedades que no han entusiasmado a los eurodiputados que tendrán que aprobar este plan de trabajo en susesión de diciembre.