Las comparecencias de los futuros comisarios ante el Parlamento europeo han entrado en un torbellino político que puede tumbar al segundo equipo de Barroso. Los socialistas piden la retirada de la candidata búlgara y los populares acusan al candidato socialista eslovaco de racismo ante la comunidad gitana.
El líder de los socialistas en la Eurocámara, Martin Schulz, ha pedido a Barroso que retire a la candidata búlgara por un supuesto conflicto de intereses y por su incapacidad para llevar la cartera de Ayuda al Desarrollo. Los servicios jurídicos del parlamento están estudiando la declaración financiera de Juleva y, de momento, el presidente Barroso la respalda.
La portavoz de Barroso, Pia Ahrenkilde, insistió este jueves en rueda de prensa en que el Ejecutivo comunitario se ha asegurado de que la declaración de intereses de cada candidato cumple las exigencias del código de conducta del colegio de comisarios.
El caso se ha complicado más, al intervenir el gobierno búlgaro en defensa de su compatriota y el primer ministro, Boyko Borisvov, quien aludió a la izquierda parlamentaria como alborotadores de Bruselas. Schulz ha respondido contundentemente: «El ex guardaespaldas del antiguo dictador comunista de Bulgaria no tiene derecho a atacarnos de esta manera». Para el gobierno de Sofía los ataques a Juleva son una maniobra de la oposición de su país y los socialistas de la Eurocámara están apoyando.