No será en Verdún, ni en el Marne, ni por las calles de París. El próximo duelo entre franceses y alemanes tendrá como escenario el Maracaná. El premio para el vencedor nada tendrá que ver con Alsacia o Lorena, sino que llegará en forma de clasificación para las semifinales de la XX edición del Mundial de fútbol. Así se ha confirmado tras las victorias de ambos equipos en los octavos de final del torneo, frente a Nigeria y Argelia.
Francia sufrió de lo lindo ante la vigente campeona de África. Didier Deschamps continuó confiando en Giroud como acompañante de Benzema en la punta de ataque y guardó a Griezmann en la recámara. Regresaban al once algunos hombres que descansaron en el tercer encuentro de la fase de grupos ante Ecuador, como Valbuena, Varane, Evra o el propio Giroud. En Nigeria, pocas novedades para afrontar un choque que podía refrendar su condición de aspirante.
Poco a reseñar de lo acontecido en la primera parte. Los europeos no tenían posibilidad alguna de imponer su mayor calidad ya que los africanos cubrían sus carencias con el despliegue físico al que acostumbran. Únicamente en dos ocasiones inquietaron los franceses a Enyeama durante los primero cuarenta y cinco minutos. En la primera, Valbuena metió un centro para el posterior remate de Pogba con la derecha que el portero nigeriano desviaría con la palma de sus guantes a saque de esquina. Otra vez, el del Olympique de Marsella se disfrazaría de asistente, en esta ocasión para habilitar a Debuchy, quien remató directamente fuera.
Después del descanso comenzó a cobrar más protagonismo la selección de Keshi. Lo tuvo que hacer sin uno de sus estandartes, Onazi, quien fue sustituido con posterioridad a una criminal entrada de Matuidi que le dobló el tobillo, y por la cual pidieron la tarjeta roja desde el banquillo verde. Reanudado el juego, Odemwingie probó fortuna con un disparo desde fuera del área que repelió un bien situado Lloris. El '8' nigeriano reclamó penalti en otra jugada para la polémica y el análisis arbitral. En un córner, Evra agarra al del Cardiff City de manera aparatosa pero no hay señalización de pena máxima. Indignación total por parte de la selección africana, que entendió que Mark Geiger les había birlado un penalti y una expulsión favorable.
Enyeama, héroe y villano
Sin embargo, el nombre propio en el día de ayer para 'Las Águilas Verdes' fue el de su cancerbero: Enyeama. Para lo bueno y para lo malo. Mantuvo con vida a los suyos cuando más apretaban los franceses, con dos intervenciones mágicas ante un crack mundial del caché de Benzema, que en primera instancia había desarbolado a la defensa con una pared apoyándose en Griezmann y, minutos después, lo intentó con un remate de cabeza en una falta botada por Valbuena. Entre medias, éste se animó también con un chut desde el pico del área que rebotó en el larguero. El guardameta africano la lió, por el contrario, en un saque de esquina en el que midió mal la salida, poniendo en bandeja el gol a Pogba en el minuto 79.
Ya por delante, Francia echó el resto con el firme propósito de proteger su marco y salir a la contra. De esta manera tuvo oportunidades para sentenciar el partido. Una de ellas fue liderada por Griezmann, pero de nuevo Enyeama mantenía a su equipo en un partido que ya agonizaba, puesto que corría el minuto 92. En la acción posterior, el córner es lanzado en corto y Valbuena avanza por la banda derecha y sirve al corazón del área con la fortuna de que por allí pasaba Yobo para introducir involuntariamente el balón en su propia portería.
Segundo partido consecutivo en el que la escuadra de Deschamps no da esa imagen poderosa ofrecida en los primeros compases del Mundial. Deberán volver a ponerse a tope si quieren continuar en Brasil, porque su próximo rival, Alemania, no perdonará errores.
Alemania evita el descalabro
Si los franceses lo pasaron francamente mal, qué decir de los alemanes. La tres veces campeona del Mundo necesitó de una prórroga para deshacerse de Argelia, un rival mucho más peligroso de lo que indicaban los pronósticos y que tuvo opciones para echar a los teutones del campeonato.
Viendo las imágenes que deparó el primer acto, cualquier aficionado podría haberse preguntado quién era de verdad la selección favorita para llevarse el pase a cuartos de final. Los norteafricanos sorprendieron a los de Joaquim Low y dispusieron de serias oportunidades de gol. Para empezar, Slimani recibió un pase largo desde la defensa y le ganó la espalda a la zaga germana, pero Neuer, que casi fue un central más, salió a su paso para evitar el gol y despejar el esférico. Acto seguido, Feghouli disparó desde una posición algo escorada en el interior del área, sin suerte. Se gustaban los argelinos de tal modo que hasta sus laterales se sumaban al ataque. De hecho, Ghoulam casi bate al meta alemán de un lanzamiento cruzado que terminó perdiéndose por línea de fondo. Un huracán pasaba por encima de la selección centroeuropea, que parecía incapaz de reaccionar.
No obstante, el mundo del deporte nos ha enseñado que el talento siempre termina apareciendo y así ocurrió con Alemania. Antes del descanso, ocasión clarísima de gol para Götze, que no aprovechó un rechace de M'Bolhi para hacer el primero. Toni Kroos no quiso ser menos y se animó desde la media distancia, perdiéndose su balón no muy lejos de la escuadra argelina.
Los europeos reaccionan y vencen en la prórroga
Cómo cambiaron las cosas en el segundo tiempo. Acertó el técnico teutón metiendo a Schürrle por Götze. Su equipo lo notó. Comenzaron a dominar más la pelota y a generar peligro de una manera muy fluida. M'Bolhi dio inicio a toda una densa gama de intervenciones con una muy buena respuesta a un testarazo de Mustafi a quemarropa que salió algo centrado. Poco después, volvía a lucirse en un latigazo de Lahm desde más allá de la frontal que sacó con una espectacular palomita.
Corrían los minutos más en contra de los blancos que de los verdes, y Müller quiso apretar el acelerador. Un cabezazo a bocajarro que llevaba su rúbrica fue resuelto con éxito, por enésima vez, por el cancerbero africano y el posterior rechace no fue convertido por Schürrle porque fue despejado sobre la raya de gol por un zaguero. Tuvo otra el '13', una jugada personal a pocos metros de la portería, pero chutó fuera. Los chicos de Salilhodzic perseveraban en sus balones largos a la espalda de la defensa germana y era Neuer el que una y otra vez se jugaba el tipo y las aspiraciones de su equipo en cada salida. Todas las completó notablemente el meta del Bayern de Munich.
En la media hora extra llegaron los tantos. No se habían cumplido los dos minutos cuando Schürrle hizo acto de presencia y le pegó francamente mal a la pelota con la gran fortuna de introducirla en el fondo de las mallas tras un centro a media altura del todopoderoso Müller. Argelia necesitaba entonces sumar efectivos en campo contrario y de ese contexto se percató Özil en el 118, momento en el que marcó el segundo culminando un buen contraataque y tras un rechace.
Quedó tiempo para un centro al área de Feghouli y un remate de Djabou en el segundo palo que maquilló el resultado final. Alemania salva una situación comprometida y en cuartos de final espera Francia. Uno de los partidos, a buen seguro, más esperados del Mundial y que será disputado por 22 futbolistas de primer nivel. Un enfrentamiento que bien podría haber sido digno de la mismísima final del torneo. El que salga vencedor de esa eliminatoria, por cierto, se las verá con Brasil o Colombia en semifinales. Casi nada.