Para evitar que lleguen radicales desde otros puntos de Europa, el Tratado de Schengen se suspendió en España a las 00.00 horas del pasado sábado y permanecerá así hasta las 24.00 horas del próximo viernes. Se han reforzado las fronteras terrestres con Francia en los pasos de La Jonquera, Portbou, Puigcerdá, Camprodon, Les y Canfranc y las aéreas de los aeropuertos de Girona y Barcelona.
Hasta el momento se ha detenido a 17 personas y denegado la entrada en España a otras 43.
Unos 4.500 efectivos de la policía autonómica catalana, mossos d'Esquadra, y otros 3.500 guardias civiles y policía nacional garantizarán la seguridad de la reunión. De momento no hay ninguna concentración anunciada salvo las caceroladas desde los domicilios convocadas por el movimiento 15M para los tres días que va a durar la reunión.
Los estudiantes universitarios se van a manifestar contra la subida de las tasas, pero nada tiene que ver con el banco europeo.
El Consejo de Gobierno del BCE se reúne cada dos semanas en su sede de Fráncfort, dos veces al año lo hace en otro país de la zona euro. Esta es la tercera vez que se reúne en España, las dos anteriores lo hizo en Madrid. En el año 2000, cuando se iniciaron estas reuniones fuera de la sede, presidía el BCE el holandés Wim Duisenberg y en la conferencia se decidió mantener los tipos de interés como estaban, al 3,5 por ciento. La segunda vez, fue bajo la dirección del francés Jean-Claude Trichet, subieron los tipos de interés un cuarto de punto. No se espera que ahora los muevan. Están en el 1 por ciento.
Estudiarán la evolución de la economía sobre todo la de España y no porque el consejo se celebre en el país sino por la penalización que está sufriendo por parte de los mercados. Tampoco se espera que se reactive el programa de compra de bonos. El BCE no compra deuda soberana de países en dificultades desde hace seis semanas.