Armenia está atacando de forma inesperada a Europa por una ley de igualdad de género que para muchos en este país promueve la homosexualidad como un «valor europeo». La reacción ha sido tan violenta que algunos observadores políticos creen que se atiza artificialmente a fin de crear apoyo popular para la decisión que tomó el mes pasado Ereván de buscar asociarse a la Unión Aduanera de Rusia, Bielorruria y Kazajstán a expensas de vínculos más cercanos con la Unión Europea.