En el último año Turquía ha comenzado a sustituir a Egipto como potencia regional y su economía ha mejorado sensiblemente. Este año podría crecer un 3,5 por ciento. El año pasado lo hizo al 8,5. El ministro de economía turco decía esta semana que la UE «acabará suplicándonos» la incorporación. Los turcos ven como la Europa a la que habían soñado pertenecer, vive momentos convulsos y desde hace tiempo han perdido el interés por pertecer al club de los 27.