La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo ha votado favorablemente un informe para dar validez a la primera Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) que ha tenido éxito y que exige, a través de casi dos millones de firmas, una gestión pública y acorde con los derechos humanos del agua y del saneamiento.
Tras años con el cartel de 'en venta', el Gobierno portugués acaba de cerrar la privatización de TAP, la aerolínea de bandera lusa, la última de Europa con capital completamente público. 354 millones de euros mediante para que el consorcio Gateway controle el 61 por ciento de la compañía aérea (los trabajadores se han quedado otro 5 por ciento), una cantidad que apenas aliviará las estresantes cuentas del Estado. Sólo 10 millones de euros irán al erario público, que sí se desprende de la deuda.
«Necesitamos un discurso esperanzador. ¿Quién debe dárnoslo? Alemania». El ministro de Finanzas griego ha regresado a Berlín para reforzar su propuesta de remar juntos hacia una Europa diferente. Tras reunirse con su homólogo alemán, Wolfgang Schäuble, en una cita que ha calificado de «productiva» y «amigable», Yanis Varoufakis ha sido recibido como la estrella principal de una conferencia organizada por la Fundación Hans-Böckler.
El fútbol, que suele vivir al margen de los cánones sistémicos, ha conquistado Berlín y Alemania justo en un momento clave. Con la cumbre del G7 celebrándose en suelo germano, y con Merkel negociando in extremis el futuro de Grecia, miles de aficionados de la Juventus de Turín y del Barcelona tomaron la capital alemana para celebrar su particular fiesta futbolística. Al final, unos lloraron y otros festejaron. Barcelona ganó su quinta Champions e hizo triplete.
A más de 100 kilómetros de Múnich, entre montañas, donde apenas una carretera permite llegar. La postal es idílica: en plenos Alpes, aún con restos de nieve en sus cumbres; pero el contexto, deshecho ya de chapa y pintura, es complejo y carente de brillo.
M. A. Fernández y J. Marcos
La crisis económica de Grecia y las recetas que se están aplicando suponen un órdago constante para la Unión Europea, que no deja de sorprender con su búsqueda de soluciones. La última pócima ha sido una reunión de urgencia celebrada el lunes por la noche.
Por Mª Ángeles Fernández y J. Marcos / Berlín
Pegida soñaba con un acto multitudinario en la capital alemana. Y no eligió una fecha cualquiera. El Viejo Continente celebraba el Día de Europa, mientras Rusia conmemoraba el final de la Segunda Guerra Mundial. Los Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente (el acrónimo alemán de Pegida) querían mostrar músculo pero apenas enseñaron la patita por debajo de la puerta.