En los últimos 15 años, China ha pasado de ser un socio económico relativamente menor de América Latina a ocupar la primera posición en la balanza comercial de algunas de las mayores economías de la región.
En muchos casos, China desbancó a Estados Unidos de lo que Washington consideraba su propio patio trasero. En su conjunto, las exportaciones latinoamericanas a China crecieron considerablemente a partir del año 2000, con una expansión anual promedio de un 23 por ciento .