Es la primera vez que se produce un ataque contra una manifestación pro derechos de los gays, en el país centroeuropeo. La manifestación del sábado ha sido también la más numerosa de los últimos años, ya que ha reunido a unas 150.000 personas en la conocida avenida Ring de Viena.
Lunaceck, que siempre ha declarado abiertamiente su lesbianismo, ha dicho que «esta clase de ataques aislados demuestran que la lucha por la tolerancia, la aceptación y el respeto en Austria no ha finalizado. Es necesario oponerse a las personas que diseminan el miedo y el odio».
El atacante arrojó la sustancia tóxica sobre Ulrike Lunacek mientas concedía una entrevista en la calle. Ni la eurodiputada ni las personas que la entrevistaban sufrieron lesiones, pero sí resultaron dañados tanto su ropa como la cámara y el equipo de los periodistas, que según una portavoz policial ascenderían a unos 50.000 euros. El ácido butírico, caracterizado por su mal olor no es una sustancia tan peligrosa como otros ácidos, pero aún así puede producir lesiones cutáneas y oculares y síntomas respiratorios por inhalación.
La política austríaca es la principal promotora de la hoja de ruta contra la homofobia y la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género que fue aprobada por el Parlamento Europeo en febrero, conocida como «informe Lunacek».