El ideal y el objetivo del presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, es que el catalán sea un idioma oficial en la Unión Europea. Y no ha perdido la oportunidad de reclamárselo al gobierno de España desde Bruselas, en su primer viaje al exterior desde que tomó posesión del cargo.
En rueda de prensa, Mas ha resaltado el número de hablantes de catalán: «de las 23 lenguas oficiales que hay en este momento, si el catalán fuera lengua oficial de la UE, sería la novena más hablada de todas».
La cuestión es que tiene que ser un Estado miembro de la UE quien lo proponga y lo defienda, por eso ha asegurado que seguirá insistiendo ante el gobierno español para que consiga la oficialidad plena.
El presidente de la Generalitat se ha entrevistado con el jefe del ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, ante quien se ha comprometido a aplicar una política de austeridad para recortar el déficit público. «No podemos ser una excepción respecto a lo que ha pasado a las familias, a las personas, a las pequeñas empresas, a los autónomos. También las administraciones se tienen que apretar el cinturón», ha dicho Mas.
A propósito de las revueltas en el Norte de África, el presidente catalán ha recordado que en Barcelona está la sede de la Unión por el Mediterráneo, «el instrumento para hacer políticas que favorezcan los procesos de democratización y modernización de todos estos países de la ribera sur del Mediterráneo».