La canciller alemana, Angela Merkel declaró que no hay que fomentar «los rumores y las especulaciones» pero no desmintió explícitamente que España hubiera solicitado la ayuda pactada entre la UE, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional de 750.000 millones de euros para países en grave riesgo de quiebra económica.
La canciller alemana comparecía en rueda de prensa con el presidente francés, Nicolás Sarkozy un encuentro que debía haberse realizado una semana antes y que se aplazó de forma brusca cuando los periodistas ya estaban en el avión que debía llevarles de París a Berlín.
Merkel y Sarkozy subrayaron su propósito de acudir a la próxima cumbre del G30 en Toronto con una posición conjunta en la que defenderán la creación de una tasa bancaria para que los institutos financieros cuenten con fondos en el caso de una nueva crisis, y la implantación de un nuevo impuesto para las transacciones.
Sin embargo no están tan de acuerdo en el tema de un gobierno económico común para la eurozona, que Sarkozy defiende pero que Merkel rechaza.