Por su parte el ministro de Medio Ambiente, Norbert Roettgen, ha pedido una nueva evaluación de riesgos en las plantas atómicas y ha señalado que su partido y el de Merkel, que gobiernan en coalición deberían reabrir el debate sobre la energía atómica.
También el grupo socialista de la Eurocámara ha pedido que las 143 centrales nucleares de la UE se sometan a test de estrés para verificar si pueden soportar situaciones extremas como la sucedida en Japón o un atentado terrorista. El presidente de la comisión de Medio Ambiente del Parlamento europeo, Jo Leinen, ha puntualizado que los reactores europeos «no se verán afectados por un tsunami, por supuesto, pero hay otros riesgos, incluyendo un atentado terrorista», que tendrían un grave impacto«en el muy poblado continente europeo».
La Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino española, Rosa Aguilar, ha dicho que no sería «responsable ni oportuno» crear alarmas sobre la utilización de la energía nuclear pese a lo que está ocurriendo. La ministra ha indicado que hay que esperar y colaborar con Japón en estos momentos tan dramáticos.
El secretario general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), con sede en Viena, Yukiya Amano, ha asegurado que las vasijas de los reactores nucleares afectados están intactas y la radiación emitida es limitada. El Gobierno japonés ha solicitado a la AIEA el envío de expertos. El secretario general, ha asegurado que la Agencia ha movilizado todos sus recursos y los ha puesto al servicio de Japón.