Cuando unos 40.000 delegados, incluidos decenas de jefes de Estado, se congreguen en París en diciembre, en la decisiva Conferencia sobre el Cambio Climático, un grupo de alcaldesas africanas reclamarán para sus municipios el acceso a la electricidad y que esta provenga de energías limpias, como un tema vital para sus comunidades.
Las alcaldesas, que representan a pueblos y ciudades de África, piden que se preste mayor atención a las localidades sin electricidad, dado el vínculo existente entre el cambio climático y la energía.
«En mi municipio, solo la quinta parte de la población tiene acceso a la electricidad, y esto, por supuesto, obstaculiza el desarrollo», dice Marie Pascale Mbock Mioumnde, alcaldesa de Nguibassal, en Camerún.
Mbock Mioumnde es una de 18 alcaldesas que han asistido a una reunión organizada por la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y el exministro francés de Medio Ambiente, Jean-Louis Borloo, que ahora dirige la Fundación Energía para África.
Según los organizadores, el objetivo del encuentro ha sido analizar los desafíos energéticos de África con vistas a la 21 Conferencia de las Partes (COP 21) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), que tendrá lugar del 30 de noviembre al 11 de diciembre y durante la cual deberá aprobarse un nuevo tratado, universal y vinculante, para responder al fenómeno.
Mbock Mioumnde nos dijo que la energía limpia y renovable es una prioridad para África, y que las lideresas políticas analizan distintos medios de electrificación, incluidas las energías hidroeléctrica, fotovoltaica y eólica.
«Tenemos la intención de mantener este contacto y esta red de alcaldesas para ver qué podemos lograr. Como alcaldesas estamos más cerca de la población, y cuando trabajamos juntas, hay esperanza», nos dijo Mbock Mioumnde.
La socialista Hidalgo, la primera mujer en ocupar la alcaldía de París, asegura que quiere apoyar la causa de la «electrificación sostenible» que defienden las representantes africanas, dado que dos tercios de la población de África, «en particular la más vulnerable, no tiene acceso a la electricidad».
Hidalgo, quien es la actual presidenta de la Asociación Internacional de Alcaldes Francófonos, dice que es esencial encontrar la forma de acelerar la electrificación en África mediante tecnología limpia que respete el medio ambiente y la salud de la ciudadanía.
Las alcaldesas reunidas en París también pidieron la creación de una «agencia africana dedicada a este tema», que sería la encargada de implementar la electrificación integral del continente para 2025.
En la conferencia han estado presentes representantes de las grandes empresas de energía francesas, como GDF Suez, lo cual indica que Francia ve una oportunidad de hacer negocios, pero también organizaciones no gubernamentales que trabajan de forma independiente para instalar la energía solar en varios países africanos.
«Me alegra que las mujeres se organicen en este tema. Nos hace falta solidaridad», expresó Hidalgo, que fomenta la acción climática de los habitantes de París, una ciudad que llegó tarde a la conciencia ambiental, sobre todo en comparación con sus pares alemanas y suizas.
La COP 21 «es una cumbre decisiva para que los líderes y quienes toman las decisiones en el planeta alcancen un acuerdo», subrayó Hidalgo. Las cuestiones relativas al cambio climático tienen un componente innegable de género porque las mujeres están especialmente afectadas por la falta de acceso a las fuentes de energía limpias.
Nacida en Etiopía y radicada en Kenia, Segenet Kelemu, la ganadora del premio L'Oréal-Unesco 2014 a las Mujeres en la Ciencia, se refirió, por ejemplo, al hecho de haber crecido en un pueblo rural en Etiopía sin electricidad, sin agua corriente y sin saneamiento.
«Salía a recoger leña, a buscar agua y a llevar los productos agrícolas al mercado. De alguna manera, todas las tareas arduas en África se reservan para las mujeres y los niños», comentó a un periodista.
Este componente de género también se planteó en una reunión celebrada a principios de mes en Addis Abeba, donde los líderes de 12 países africanos acordaron 12 recomendaciones para mejorar la respuesta regional al cambio climático, entre ellas mayor investigación tecnológica y desarrollo locales, reforzar la infraestructura para las energías renovables, el transporte y el agua, y «la incorporación de medidas climáticas con perspectiva de género».
La reunión forma parte de una serie de talleres en el marco del Foro sobre el Clima Vulnerable (FCV) que se realizarán en todo junio en América Latina, Asia, Medio Oriente y la región del Pacífico. El FCV se estableció para que los países vulnerables puedan tener una plataforma de cooperación Sur-Sur para hacer frente a los problemas del cambio climático.
En París, la estrategia de Hidalgo incluye convocar a la mayor cantidad posible de interesados para alcanzar el consenso antes de la COP 21. Junto con Ignazio Marino, el alcalde de Roma, también invitó a los alcaldes de las «capitales y grandes ciudades» de los 28 estados miembros de la Unión Europea a una reunión en marzo.
Los alcaldes, que representan a unos 60 millones de habitantes, destacaron que la «lucha contra el cambio climático es una prioridad de nuestras ciudades y el bienestar de nuestros ciudadanos».
La oficina de Hidalgo trabaja en un proyecto para contar con la presencia de 1.000 alcaldes de todo el mundo en la COP 21, nos indicó un portavoz. Hay mucho en juego porque el gobierno francés quiere que la cumbre sea un éxito, y que se alcance un nuevo acuerdo mundial para la lucha contra el cambio climático.