El secretario de Estado para la UE, Íñigo Méndez de Vigo, prevé una «batalla política» para ver qué se hace con ese multimillonario excedente de fondos. Su idea es que la reasignación prime la formación de jóvenes u otras políticas para fomentar el empleo juvenil, como ya adelantó en Berlín Mariano Rajoy.
Pero Bruselas tiene intenciones distintas y propone que cada país, con los fondos que tiene asignados y no gastados, promueva políticas de fomento del empleo y «haga un uso más eficiente». Se calcula que del total de ese excedente de fondos a España le corresponderían 10.700 millones, 8.000 millones proceden de las ayudas regionales de los fondos estructurales y de cohesión y 2.700 millones del fondo social europeo. La portavoz de empleo de la CE ha aclarado que esas subvenciones pueden utilizarse para formación pero también para respaldar reformas en el mercado de trabajo.
El objetivo es el mismo para todos, pero la fórmula está por ver. El portavoz comunitario de Política Regional, Ton van Lierop, ha dicho que esos fondos se quieren localizar en combatir el paro juvenil y la creación de pymes. «Nuestros expertos están dispuestos como siempre, pero ahora incluso más porque sabemos que se necesita también crecimiento en tiempos de austeridad, a sentarse con los Estados miembros para ver cómo se puede reprogramar o reajustar para lograr mejores resultados», ha señalado.
Los jefes de Estado y de gobierno de la UE tratarán la cuestión en la cumbre del próximo lunes y la redistribución de los fondos europeos disponibles aparece ya en el borrador del Consejo. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha dicho este viernes que quiere tener listos en abril planes concretos de empleo. «No podemos aceptar que casi un tercio de los jóvenes de Europa estén en paro».
El debate sobre la necesidad de fomentar el empleo se ha intensificado justo cuando en España se ha conocido que 2011 se cerró con la cifra récord de 5.273.600 parados, lo que representa un 22,8%.
Tanto el gobierno español como la UE han calificado el dato de inaceptable. En el Foro de Davos, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha señalado que combatir el paro será la «principal prioridad» del ejecutivo. El comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha reiterado la necesidad de que España cumpla con el objetivo de déficit previsto y de que se lleve a cabo la reforma laboral, porque una tasa de paro así «no se puede sostener por mucho tiempo».