Unas 28 personas fueron rescatadas en una zona cercana a aguas libias, a 120 millas al sur de la isla italiana de Lampedusa, según una portavoz de la ONU. Varias embarcaciones de la Marina y la guardia costera italiana buscan supervivientes en el lugar.
Si se confirma,esta tragedia sería la peor que ha sucedido desde hace décadas en el sur del Mediterráneo y elevaría el número total de fallecidos desde que comenzó este año a más de 1.500.
«Tememos en este momento que sea una tragedia de proporciones realmente grandes», ha dicho Carlotta Sami, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, al canal de televisión SkyTG24.
La emergencia se declaró en torno a la medianoche. Al parecer la embarcación habría volcado cuando los inmigrantes se movieron hacia un lado en un momento en el que un barco se aproximaba a socorrerlos..
«Los primeros detalles llegaron de uno de los supervivientes que hablaba inglés, que dijo que al menos 700 personas, incluso más, iban a bordo. El barco volcó porque la gente se movió hacia un lado cuando se acercó otro barco que esperaban que fuera a rescatarlos», ha dicho Sami.
El barco siniestrado había lanzado una señal de alerta en la madrugada de este domingo que fue captada por los guardacostas italianos, que avisaron a un carguero portugués que estaba en la zona. A su llegada al lugar, la tripulación del carguero vio como las personas que iban en el barco en peligro se precipitaron todas hacia un lado lo que pudo haber provocado la catástrofe.
Un importante dispositivo de socorro formado por 17 navíos de las marinas italiana y maltesa se ha puesto en marcha.
Tras el derrocamiento del exlíder Muammar Gaddafi en 2011, el estado sin ley de Libia, ha dejado vía libre a bandas criminales de traficantes de personas que hacen su negocio con desesperados que intentan salir desde África y Oriente Próximo.
La Comisión Europea ha hecho público un comunicado en el que se muestra «profundamente conmocionada por los trágicos acontecimientos de hoy en el Mediterráneo, y también de los últimos días y semanas.»
El Presidente Juncker ha encargado al Primer Vicepresidente Frans Timmermans, a la Alta Representante y Vicepresidente Federica Mogherini y a Dimitris Avramopoulos, Comisario responsable de Migraciones, que preparen una nueva Agenda Europea de Migración y «que pongan en acción de manera rápida y eficaz todos los instrumentos actuales de la UE.»
Por su parte, la responsable de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini, ha decidido incluir la cuestión de las muertes en el Mediterráneo en la agenda de la reunión oficial de los ministros de Relaciones Exteriores de la UE que se celebrará el lunes en Luxemburgo.
La triste realidad es que están llegando menos inmigrantes a la costa italiana pero ha aumentado de forma alarmante el número de muertes. En torno a 20.000 inmigrantes alcanzaron la costa italiana este año, según estimaciones de la Organización Internacional para la Migración. Una cifra inferior a la registrada en los primeros cuatro meses del año pasado, pero el número de muertes ha aumentado casi nueve veces.
Italia eliminó su operación Mare Nostrum a finales del año pasado, cuando entró en funcionamiento la misión de la UE, Tritón, pero esta última está capacitada únicamente para el control de fronteras, de hecho depende de Frontex, y no tiene competencias para el rescate. Sin contar con que tiene un presupuesto bastante más bajo y menos medios.
El jefe de gobierno italiano, Matteo Renzi, ha reclamado este domingo una cumbre europea urgente que espera se celebre antes de que acabe la próxima semana. Por su parte, el presidente francés, François Hollande, ha pedido una reunión urgente de los ministros de Interior y Exteriores de la Unión Europea para hacer frente a la situación.
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha dicho durante un mitin electoral en Alicante que la respuesta a esta situación «tiene que venir de Europa» y que «ya no valen las palabras, hay que actuar». «Los europeos nos jugamos nuestro crédito si no somos capaces de evitar estas dramáticas situaciones».
El alto comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, António Guterres, ha señalado que «este desastre confirma la urgencia que hay de restaurar una operación de rescate marítimo y establecer vías legales para llegar a Europa». «De otro modo, la gente que busca seguridad seguirá muriendo en el mar.» El papa Francisco ha instado a la comunidad internacional a actuar con «decisión y rapidez» para evitar nuevas catástrofes.