«Todo acto de violencia basado en el género que tiene como resultado posible o real el daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la coerción o la prohibición arbitraria de la libertad, ya sea que ocurra en la vía pública o en la vía privada», así se define la «violencia contra la mujer» en la Declaración Contra la Violencia sobre las Mujeres firmada por la ONU en 1993, 33 años después del asesinato de las hermanas Mirabal a manos del dictador Rafael Leónidas Trujillo.
Ya en 1981, el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe celebrado en Colombia, recordó el triste suceso y marcó esa fecha en su calendario. Fué entonces cuando se vio que era necesaria «una clara declaración de los derechos que se deben aplicar para asegurar la eliminación de toda violencia contra la mujer en todas sus formas, y un compromiso de los Estados y de la comunidad internacional en general para eliminar la violencia contra la mujer». Y de ahí llegó, 12 años después, la respuesta de las Naciones Unidas y la celebración anual de una reivindicación histórica: la de la igualdad en todas sus formas entre el hombre y la mujer y la de la lucha contra la discriminación y la violencia sobre éstas, también en todas sus formas.
Según los datos de las Naciones Unidas, actualmente hasta un 70 % de las mujeres de todo el mundo sufre o sufrirá algún tipo de violencia en su vida. Los mismos datos destacan que cada año entre 500.000 y 2 millones de personas son víctimas de trata, prostitución, trabajos forzados, esclavitud o servidumbre y de éstas, el 80% son mujeres o niñas.
Este 25N, en su mensaje personal, Ban Ki-moon, Secretario General de la ONU, apoya y recuerda que todos los esfuerzos son pocos para luchar contra la lacra de la violencia. «Acojo con beneplácito el coro de voces que piden que se ponga fin a la violencia que afecta a alrededor de una de cada tres mujeres a lo largo de su vida. Aplaudo a los dirigentes que están ayudando a promulgar leyes y a hacerlas cumplir, y a cambiar mentalidades. Rindo homenaje, además, a todos los héroes en el mundo que ayudan a las víctimas a sanar y a convertirse en agentes de cambio», ha subrayado en la página oficial de la ONU.
El Día Naranja y 16 días de activismo
Tradicionalmente, el 25N marca el inicio de 16 días de activismo contra la violencia hacia las mujeres. Hasta el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos, los estados realizarán diferentes actividades, convocatorias, manifiestos y políticas para organizarse y combatir la violencia contra las mujeres y, de manera simbólica, este año las instituciones promueven el uso de una prenda de ropa de color naranja para mostrar su compromiso con la causa.
Para Ban Ki-moon «una forma de lograr el cambio es contribuir a la labor del Fondo Fiduciario de las Naciones Unidas en apoyo de las medidas para eliminar la violencia contra la mujer, que ayuda a dar respuesta a las violaciones de los derechos humanos y a necesidades que van desde la integridad física hasta la seguridad económica». Esa demanda de fondos se ha multiplicado en los últimos años y el dinero disponible para distribuir ha disminuido a su vez en un 60 %, la situación es, en este sentido, urgente.
«Hago un llamamiento a todos los asociados para ayudar a atender esta gran necesidad insatisfecha de recursos a fin de promover aún más los esfuerzos para prevenir y poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas», ha declarado Ban Ki-Moon.
La violencia en casa
Según revela un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) realizado en 11 países, el porcentaje de mujeres que han sido sometidas a algún tipo de violencia de tipo sexual dentro de la pareja varía del 6 % en Japón al 59 % de las mujeres en Etiopía y hasta el 70 % de las mujeres en general vivirá alguna situación de violencia en su vida, ya sea por ser golpeadas, obligadas a tener relaciones sexuales o abusadas de alguna manera.
En España, 700 mujeres han sido asesinadas en los últimos 10 años por hombres con los que mantenían o habían mantenido alguna relación sentimental. La media es de unos 70 asesinatos al año desde 2003, año en el que empezaron a contabilizarse los crímenes de género en nuestro país, paso previo a la aprobación de la Ley de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, en el año 2004. De la serie de datos que maneja el Observatorio Estatal de Violencia sobre la Mujer, se extrae que en 2012 se produjo el menor número de muertes, 52. En 2009 se registraron 56 y, en 2005, 57. El resto de años, las muertes superaron la sesentena.
Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), más de 600.000 mujeres en España sufren maltrato cada año, aunque menos de la cuarta parte se decide a contarlo. La misma institución sostiene que unos 800.000 niños y niñas padecen en España las consecuencias directas o indirectas de la violencia machista.
El último informe del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial, señala que las denuncias por violencia machista registradas en los juzgados españoles han descendido un 4,1 % en 2012, casi 15 denuncias menos al día respecto al año anterior. Una disminución que comenzó a la vez que la crisis económica y que representa una caída de las denuncias de un 9´6 % en los últimos cinco años. En el primer semestre de 2013, según el Observatorio, el número de denuncias ha bajado un 4 % respecto al mismo periodo de 2012.
La falta de estabilidad económica y el miedo a no poder sostener a la familia si se produce una separación son las primeras causas reconocibles de esta caída de las denuncias en un contexto de recortes en los servicios de asistencia social y médica. Las mujeres, revela el Observatorio, se sienten más indefensas que nunca.
En Europa la situación de las denuncias no es mejor y, como revela un estudio del European Institute for Gender Equality (EIRE), el porcentaje de mujeres que denuncian es muy bajo, una media del 25 %, además de que sólo un tercio de los Estados miembros contabiliza específicamente los crímenes de violencia machista. Es más, apenas cuatro países de la UE han introducido en su código penal la definición de violencia de género.
Otros tipos de violencia
Los datos que maneja la ONU son escalofriantes:
- Más de 130 millones de mujeres y niñas de todo el mundo, según la ONU, han sido sometidas a la mutilación genital femenina, sobre todo en África y Oriente Medio. Se calcula que unos 2 millones de niñas corren riesgo de ser sometidas a una mutilación de los órganos genitales cada año.
- A nivel mundial, una de cada cinco mujeres será violada o tratarán de violarla a lo largo de su vida.
- Cada año mueren más de 5.000 mujeres «por motivos de honor» (mujeres sospechosas de practicar sexo prematrimonial y mujeres acusadas de adulterio).