Según cuenta este domingo el semanario alemán Der Spiegel, Schäuble lo habría planteado directamente al ministro español, Luis de Guindos, en la entrevista que mantuvieron en Berlín el miércoles, y el titular español de Economía lo habría rechazado asegurando que España será capaz de salir adelante por sí sola.
Según esa publicación, el gobierno alemán estima que los bancos españoles necesitarán entre 50.000 y 90.000 millones de euros para sanearse, una cantidad que en Berlín se considera excesiva para España, ante las dificultades que está teniendo para financiarse en los mercados, con intereses que ya se acercan al 7%. Si las elecciones griegas del 17 de junio provocan un cambio de gobierno que obligara a salir a Grecia del euro, se teme que el contagio sea inevitable.
Merkel es la principal opositora a que los bancos puedan obtener capital del fondo de rescate europeo directamente sin que los Estados se vean afectados. Una fórmula que defiende el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, apuntada también por la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional, para romper la relación ante los mercados entre la banca y la deuda pública.
A pesar de la desconfianza del gobierno alemán hacia España, públicamente esta semana, tanto Merkel como Schäuble defendieron las reformas que el gobierno del PP está llevando a cabo para garantizar la estabilidad presupuestaria.