Para la UE, que ha apoyado su ingreso desde el primer momento, aunque con algunas objeciones, «esto va a facilitar la inversión y el comercio, ayudará a acelerar la modernización de la economía rusa y ofrece muchas oportunidades para hacer negocio tanto a las empresas rusas como europeas». De Gucht ha dicho que «confía que Moscú, cumpla con las normas del comercio internacional».
A partir de ahora, Rusia debe reducir sus aranceles, limitar sus derechos de exportación, otorgar mayor acceso a los mercados para los proveedores de servicios, y adoptar nomas y regulaciones sobre todo en materia aduanera, normas técnicas y protección de la propiedad intelectual. También deberá aplicar nuevas medidas de salud y sanitarias a los productos que comercialice.
Para los países europeos, la posición geográfica de Rusia y su importante mercado, tanto en volumen como en crecimiento, lo convierten en un socio comercial muy importante. Aun así la UE está especialmente preocupada por la nueva legislación rusa que establece una cuota de reciclaje de coches, lo que podría discriminar a los vehículos importados desde Europa. De momento Bruselas ya ha dicho que está en contacto con las autoridades rusas para asegurar que se respetan todos los compromisos que han adquirido con la OMC.
Durante este período las relaciones comerciales entre ambos se establecían en el Acuerdo de Colaboración y Cooperación, que entró en vigor el 1 de diciembe de 1997. El convenio regulaba las relaciones políticas y económicas entre ambos como base legal para el comercio bilateral.
Rusia es el tercer socio comercial de la UE y los países europeos son el primer socio comercial de ese país. En 2011 las exportaciones de la UE a Rusia se situaron en torno a los 108 mil millones de euros y las importaciones rusas alcanzaron los 200 mil millones. Los países de la Unión Europea son los mayores inversores extranjeros con más de 120 mil millones de euros en 2010. Por contra las inversiones rusas en Europa ese mismo año, fueron de 42 mil millones.
Las principales exportaciones hacia Rusia son coches, medicamentos, piezas de automóviles, teléfonos y tractores. Mientras que Europa le compra petróleo y gas, así como otras materias primas importantes. Con la adhesión a la OMC Rusia deberá eliminar en los próximos 4 años, sus límites actuales de capital a los inversores extranjeros, estipulado en un 49 por cien.